La Organización StopVIH suscribió en su totalidad el acuerdo establecido por unas 50 organizaciones sociales de todo el país, en el que se ratifica la delicada situación de la salud de los venezolanos por escasez de medicamentos y exigen al Gobierno no dispersarse en discursos políticos sino actuar con la emergencia del caso.
Atención en salud, tratamientos, exámenes de laboratorio y disponibilidad de servicios de salud pública, deben estar a disposición de la población, refiere el Comunicado entregado a las autoridades nacionales, pero que también llegará a los entes internacionales que han mostrado disponibilidad de apoyar a Venezuela.
La crítica situación económica actual y la dependencia del sistema de salud venezolano de materias primas e insumos provenientes del exterior, implican que, aún poniendo en práctica de inmediato los correctivos urgentes que se necesitan, no será posible garantizar atención en salud a todas las personas que la requieren en menos de 6 meses.
Actualmente, la mayoría de los centros de salud públicos no cuentan con condiciones que garanticen una atención mínima adecuada, debido a la disminución de cerca del 70% de sus médicos para prestar servicios de diagnóstico, tratamiento e intervenciones quirúrgicas, la pérdida de más del 50% del personal médico y la precariedad en la que se encuentran su infraestructura y equipamiento. A esta situación contribuye que no se haya adoptado un marco jurídico e institucional que integre al sistema sanitario de salud pública, y a través del cual se ejerza su rectoría, conforme a las obligaciones constitucionales e internacionales del Estado con la protección de los derechos a la salud y la vida”.
Jhonatan Rodríguez, presidente de StopVIH, rechaza que el Gobierno no haya advertido las consecuencias que tendría frenar los pagos a los laboratorios internacionales y no agilizar divisas para los nacionales, “no se tomaron las medidas necesarias para proteger a la población del desabastecimiento, el cual asciende en 2016 al 80% de los requerimientos a nivel nacional”.
Las agrupaciones promotoras de salud afirman que la ayuda humanitaria es un mecanismo idóneo y disponible para enfrentar situaciones extremas, en un contexto de alta fragilidad desde el punto de vista jurídico, institucional, social y económico como el de Venezuela, por lo que piden que sea solicitada a órganos internacionales con la experiencia necesaria para poner en práctica los mecanismos de provisión, distribución y control de insumos, reactivos y medicamentos.
El politólogo y director de Convite AC, Luis Francisco Cabezas, indicó que la ayuda humanitaria tiene que priorizar a los niños, mujeres embarazadas y adultos mayores, al ser la población más afectada por la crisis en la que se encuentra el país
De aproximadamente 7 millones de personas que requieren atención, las organizaciones como Convite aseguran que solo la han recibido un poco más de 1 millón
Fundación de Citgo, la filial de Pdvsa, aporta fondos por unos $565.000 para programas de atención a migrantes venezolanos y de otros países que siguen llegando a Estados Unidos.
