«Toda mi solidaridad absoluta a Cilia Flores y a Nicolás Maduro por el ataque que tiene esta gente contra ellos», dijo refiriéndose al debate abierto por la oposición en la Asamblea Nacional sobre el caso de los sobrinos de la pareja presidencial, en el que se aprobó el inicio de una investigación por «tráfico de influencias».
El capitán Cabello, uno de los hombres más importantes del chavismo, acusó a la oposición de no respetar «códigos éticas de política», porque «la familia no se toca».
«Ellos con un ataque contra Cilia, cuando en todo caso, de haber una situación de un hecho son responsabilidades individuales», indicó.
En el juicio, que se completó la semana pasada tras un año de la detención de los dos hombres, se concluyó que los sobrinos presidenciales aprovecharon facilidades vinculadas a la Presidencia venezolana, inclusive la Rampa 4, del aeropuerto Simón Bolívar de Maiquetía, para traficar narcóticos. También, habrían utilizado pasaportes diplomáticos, lo cual es negado por la Cancillería venezolana.
Cabello dijo sin embargo, dijo que, en su opinión, las acusaciones contra Efraín Antonio Campo Flores y Francisco Flores de Freitas, sobrinos directos de las primera dama, «no existen».
«Para mi esos muchachos están secuestrados en EE.UU», afirmó.
Cabello dijo que «es peligroso, muy peligroso», atacar a las familias del chavismo, y preguntó qué pasaría si ellos van «al ojo por ojo».
El diputado exigió respeto porque «la familia es sagrada», dijo.
Los jóvenes fueron declarados culpables por un jurado en Nueva York luego de dos semanas de juicio tras ser acusados de conspirar para exportar y distribuir cocaína en EE.UU.
Desde que los jóvenes fueron detenidos en Haití el 10 de noviembre de 2015, el jefe de Estado venezolano y su esposa han evitado hacer comentarios al respeto, salvo para sugerir que sus parientes fueron detenidos ilegalmente y secuestrados por las autoridades estadounidenses.