Al menos 17 personas murieron, entre ellas ocho menores de edad, al estallar en la madrugada del sábado una bomba trifásica durante una fiesta de graduación de estudiantes de bachillerato en un club social en la urbanización El Paraíso, en el oeste de Caracas.
La tragedia se produjo cuando un adolescente decidió estallar la bomba lacrimógena en plena fiesta, donde se encontraban más de 500 personas en el Club Los Cotorros. El local está clausurado este sábado por las autoridades y a sus puertas se observaban algunos de los zapatos de las personas que salieron despavoridas de la fiesta tras el estallido, constataron reporteros de El Estímulo.
Entre las víctimas mortales hay adultos, jóvenes y menores de edad. Algunos de ellos fallecieron por asfixia, reseñó un reporte preliminar de la Policía Nacional Bolivariana.
El número de muertos podría aumentar en las próximas horas debido a la gran cantidad de personas que se encontraban en el lugar cuando estalló el artefacto, cerca de la 1:30 de la madrugada, advirtieron las autoridades.
Nestor Reverol, ministro del Interior, informó que siete personas resultaron detenidas, entre ellas, dos menores de edad y la encargada del local por violar las medidas de seguridad sobre ingreso de armas de fuego en establecimientos comerciales.
Al parecer, el adolecente lanzó la bomba lacrimógena en medio de una pelea que se produjo en la fiesta de graduación.
El ministro también contabilizó cinco personas lesionadas, tres de ellas menores de edad. Los heridos fueron trasladados a centros de salud públicos y privados como el Hospital Pérez Carreño, la Clínica Popular El Paraíso, la Clínica Loira y la Clínica Amay.
Entre llantos, familiares de algunas de las víctimas se encuentran en la sede de la Policía Científica en Caracas para ofrecer testimonios del suceso, cuyos detalles está siendo investigado por las autoridades.
Entre los fallecidos destacan jóvenes entre 18 y 20 años que disfrutaban la fiesta.
Los muertos identificados por un reporte preliminar de la PNB son: Luis Eduardo Barrios (46 años); Alexander Castro (19 años); Adrián Blanco (16 años); Luis Roniel Guerra (19 años); Marcos Altuve (18 años) y Alexandra Yepes Poveda (17 años); Coromoto Rangel (18 años).
En teoría, una bomba lacrimógena de estilo trifásico están en poder de organismos como la Policía Nacional Bolivariana o la Guardia Nacional para alteraciones de orden público. Cuando se detona al aire libre una granada de esta características, se genera una nube tóxica de 6 a 9 metros de diámetro, que se va dispersando en minutos.
Las concentraciones son mucho más elevadas en espacios cerrados y potencialmente fatales, advierte un informe sobre la peligrosidad de las lacrimógenas divulgado por el Colegio Nacional de Periodistas.
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