Las noches de drogas, sexo, robos y alcohol del Metro
Cuando el reloj se acerca a las nueve de la noche, la gran masa de gente que usa el Metro de Caracas —desde que abre a eso de las 5:30 am— empieza a disminuir. La mayor parte del tráfico se dirige hacia las estaciones que colindan con ciudades satelitales. En Zona Rental, las personas que viven en Los Teques se siguen embarcando rumbo a Las Adjuntas con la esperanza de no ver nada digno de contar. Lo mismo ocurre en la Línea 3, que finaliza en el ferroviario de La Rinconada. Más allá de eso, la ausencia de personas hace que la violencia cotidiana sea más fácil de identificar.