En ese sentido, aseguraron que organizaciones como Cáritas de Venezuela y diversas instituciones de promoción social de la iglesia “con un extenso alcance en todo el territorio nacional“ se comprometen a “continuar el servicio que venimos realizando con equidad, inclusión, transparencia y efectividad“.
El comunicado conjunto también llamó a la población a unirse a la Eucaristía del próximo domingo 10 de febrero “antesala de la jornada mundial por los enfermos, y así orar en todos los templos, en nuestras casas y comunidades“.
Respecto a las acciones de calle promovidas por la oposición del país para el pasado 23 de enero y 2 de febrero, las organizaciones religiosas firmantes del documento consideran que es un muestra de que “el pueblo venezolano ha despertado, está en la calle porque anhela un cambio en el rumbo político y democrático del país“ y ambas fechas “dan testimonio de la fuerza y la perseverancia de un pueblo que cuando es exigido responde positivamente ante el anhelo de un mejor futuro, donde la vida no esté en riesgo permanente“.
“Es moralmente inaceptable la creciente represión por motivos políticos, la violación de los Derechos Humanos y las detenciones arbitrarias y selectivas. Como ciudadanos y servidores de las comunidades, les exigimos a los organismos de seguridad del Estado que no sigan reprimiendo a sus hermanos venezolanos y asuman su verdadera responsabilidad de proteger al pueblo en toda circunstancia, particularmente cuando ejerzan el derecho a la protesta pacífica“, siguió el escrito.
En el texto se pidió al Ministerio Público y a la Defensoría del Pueblo a “cumplir con su primer deber que es el estar al servicio del pueblo, y de una vez por todas, se acaben los abusos de poder y antes descritos, en particular a lo que se refiere a las detenciones de menores de edad“.
