Empresas y Negocios

Cervecería Polar manda a sus casas con sueldo básico a 10 mil trabajadores

La empresa se quedó sin materia prima y el 29 de abril se paralizó la planta de San Joaquín (estado Carabobo), la última de las cuatro que procesan la cebada malteada para cerveza y malta. Con esta medida forzosa se fueron a casa los últimos trabajadores para un total de 10 mil cuya relación laboral se mantiene suspendida hasta nuevo aviso.

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A medida que las instalaciones iban cerrando, Cervecería Polar notificaba a sus empleados la suspensión de la relación laboral, establecida en el artículo 72 de la Ley Orgánica del Trabajo.

Desde que la producción de la planta de San Joaquín detuvo sus operaciones el 29 de abril -antes lo hicieron las de Barcelona, Los Cortijos y Maracaibo– aumentó el número de trabajadores que fueron enviados a sus casas con salario básico.

De acuerdo con información suministrada a través de redes sociales por los mismos empleados, se trata de 10 mil personas que no laborarán temporalmente por la falta de la materia prima (cebada malteada) para la elaboración de cerveza y malta Polar en sus cuatro plantas.

El gobierno ha negado el acceso a la empresa a las divisas para poder cancelar compromisos pendientes con sus proveedores y reactivar las importaciones de la cebada que no se produce en el país, según han manifestado gerentes de la compañía.

La planta de San Joaquín concentra la mayor cantidad de trabajadores por instalación y son 1.147 en nómina diaria y 380 en nómina mensual. La mayor parte de los empleados pertenece a las áreas comerciales, agencias de distribución de Cervecería Polar en todo el país. Se trata de alrededor de 100 agencias.

En el Centro Empresarial Polar, sede corporativa de Los Cortijos, hay unos 300 trabajadores que también fueron suspendidos.

Desde el momento del cierre de cada una de las plantas los trabajadores de cada una de estas fueron enviados a casas. La medida afecta no solo a los centros de producción, sino a la plantilla comercial, gerentes corporativos, gerentes de ventas, de comercialización y en igualdad de condiciones.

Las plantas incluyen a Superenvases, que fabrica latas y chapas para Empresas Polar y a Metalgráfica que elabora las gaveras de plásticos para las cervezas y maltas.

De acuerdo con el artículo 73 de la Ley Orgánica del Trabajo, «durante el tiempo que dure la suspensión, el trabajador no estará obligado a prestar el servicio ni el patrono a pagar el salario».

Sin embargo, Cervecería Polar mandó a los empleados a casa por un mes con salario básico, que está por encima del salario mínimo, dijeron algunos de los consultados por El Estímulo.

«En esta primera etapa se habla de un mes, que es el tiempo que considera la empresa. Si no llega materia prima en ese lapso se pasa a una segunda fase por un  período prudencial que se estima sea de un mes más, en el cual el trabajador percibirá el salario mínimo nacional (Bs 15.051)», precisó uno de los trabajadores.

En cualquiera de los casos al empleado se le mantiene la póliza de Hospitalización, Cirugía y Maternidad, que es el único beneficio del que gozará además del salario.

Si la empresa no ha podido obtener la materia prima, entrado el tercer mes los trabajadores dejarán de devengar el salario pero seguirán disfrutando de la cobertura que les brinde el plan de seguro.

Otra área de negocio de Polar como Pepsico Venezuela trabaja con normalidad hasta los momentos, en tanto que dentro de la división de Alimentos, el grupo tiene algunas líneas paralizadas por falta de materia prima o insumos, como por ejemplo la de mayonesa o de la mezcla para cachapas, cuyos trabajadores también se encuentran suspendidos.

En otros casos las producción es intermitente, se paraliza pero al llegar los pedidos ya agotados se reactiva de nuevo.

Venezuela, dependiente de las exportaciones petroleras, sufre los efectos del derrumbe de los precios del crudo que ha puesto en aprietos al gobierno que mantiene un férreo control de cambio.

La falta de divisas para hacer frente a los compromisos con proveedores y reponer inventarios para mantener operaciones ha venido asfixiando a la principal corporación productora de alimentos y productos de consumo masivo.

El presidente Nicolás Maduro responsabiliza al presidente de Empresas Polar, Lorenzo Mendoza, de estar al frente de una supuesta guerra económica que persigue desestabilizar a su gobierno.

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