En medio de la peor crisis económica del último siglo en Venezuela, la industria del delito prospera e impulsa a que un sector verdaderamente productivo siga expandiéndose: el blindaje de vehículos, negocio que no obstante ha dejado de depender de la protección a carros ensamblados para apuntar hacia los importados y el mantenimiento de blindados de vieja data.
Aunque con menos bríos que en años anteriores, este sector sigue disfrutando de una salud bastante buena para los tiempos que corren, y ello queda en evidencia cuando se tiene que de las aproximadamente 10 empresas que existían en 2007, la cifra supera hoy las 100 compañías; crecimiento amparado en la oportunidad de negocio y el auge de la delincuencia, problema que en los últimos 10 años ha fluctuado entre las preocupaciones que aquejan a los habitantes de la Venezuela revolucionaria.
El accidente causó fuerte retraso vehicular en la Autopista Regional del Centro (ARC)
