Arreaza niega que haya crisis humanitaria y pone en duda la escasez
Ante el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el canciller Jorge Arreaza negó este lunes que exista una crisis humanitaria en Venezuela.
Venezuela
«La situación de Venezuela no es una crisis humanitaria. Se pretende hacer creer en el mundo que en Venezuela hay una crisis humanitaria, viejo truco de Estados Unidos», dijo el jefe de la diplomacia venezolana.
El canciller aseguró que mostrar a Venezuela como un Estado incapaz de cubrir las necesidades mínimas de su población en cuanto a alimentos, medicinas, seguridad personal y servicios públicos es una estrategia de Estados Unidos para apoderarse de sus riquezas naturales.
«Para Estados Unidos es indispensable revocar al gobierno democrático de Venezuela, para apoderarse de nuestros recursos minerales. En 55 días hemos recibido por parte de la delegación Trump 105 ataques directos contra nuestro país», denunció Arreaza.
Arreaza también puso en duda la escasez de insumos básicos. Dijo que si ella existe, ésta se debe a las sanciones internacionales impuestas injustamente contra su país.
Asimismo, negó que haya una «crisis de refugiados», a pesar de las decenas de miles de personas que han huido de Venezuela y se han refugiado en los países limítrofes, como Brasil y Colombia.
El jefe de la diplomacia venezolana arremetió, además, contra la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, por «emitir informes infundados» respecto a lo que sucede en Venezuela «sin visitar» el país. El gobierno de Venezuela no ha extendido una invitación formal a ese organismo para hacer su trabajo en libertad.
Arreaza pidió que el trabajo de esa Oficina y del propio Consejo «no se politicen» ni se usen para justificar «guerras e intervenciones en nombre de los derechos humanos».
El canciller concluyó citando los avances en las políticas sociales implementadas por su gobierno, criticado por diversas organizaciones internacionales de violar los derechos humanos de los venezolanos. Incluso, enfrenta el inicio de una investigación preliminar por la Corte Penal Internacional por violaciones masivas de los derechos fundamentales durante las protestas opositoras de 2017 que dejaron más de 150 muertes.
