Juan Pablo Guanipa, chiquito pero cumplidor
Gobernador electo del Zulia, se le impidió asumir el cargo, ha fraguado su liderazgo en el crisol de las derrotas y los retos personales. Su formación juvenil lo definió. Desde chamo, fue un pregonero de la democracia cristiana. Sin poder hacerse de un cargo ejecutivo, despunta en la Asamblea Nacional donde ahora es el primer vicepresidente de Juan Guaidó