A última hora el mandatario canceló su viaje a la cumbre de la CELAC que arranca mañana en Buenos Aires y denunció un plan en su contra de la "derecha neofacista". Representantes de la oposición argentina solicitaron su captura en instancias legales y ante la DEA
El gobierno de Brasil prácticamente lo anunció en la mañana al cancelar la reunión agendada entre Nicolás Maduro y Lula Da Silva, a solicitud de Venezuela y sin dar mayores explicaciones, de acuerdo a lo publicado por la agencia EFE. Hasta que finalmente en la tarde de este lunes un comunicado oficial de Miraflores explicó que había una conspiración en contra de la representación venezolana y por tal motivo se suspendió el viaje de Maduro a Buenos Aires para participar en la séptima cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, CELAC.
«En las últimas horas hemos sido informados, de manera irrebatible, de un plan elaborado en el seno de la derecha neofascista, cuyo objetivo es llevar a cabo una serie de acciones de agresión, en contra de nuestra delegación encabezada por el Presidente de la República, Nicolás Maduro Moros», dice el documento: «pretenden montar un show deplorable, a fin de perturbar los efectos positivos de tan importante cita regional y así contribuir a la campaña de descrédito – ya fracasada – que se ha emprendido contra nuestro país desde el imperio norteamericano».
Pero, «ante este escenario de planes extravagantes diseñados por extremistas de la derecha alienada a intereses externos a nuestra región», se tomó la decisión de que si bien Maduro se queda a buen resguardo en Caracas, la delegación venezolana en la cumbre estará encabezada por el canciller Yván Gil, quien llegó a Argentina en horas del mediodía.
El encuentro entre Maduro y Lula era, quizás, la cita más importante o la que generaba más expectativas tras el distanciamiento diplomático y el ánimo de confrontación que hubo entre ambos gobiernos durante la gestión de Jair Bolsonaro.
La presencia de Maduro había caldeado el ambiente en días y horas previas a la cumbre de la CELAC, tras ser denunciado por particulares y organizaciones civiles ante la justicia argentina por violación a los derechos humanos, y algunos dirigentes opositores pidieron incluso que fuera detenido si llegaba al país. El domingo, por ejemplo, un grupo de venezolanos exiliados en Argentina con apoyo de locales y de representantes de la oposición política de ese país llevaron a cabo una protesta frente al Hotel Sheraton donde se suponía se hospedaría Maduro a su llegada a la capital argentina y donde se desarrollará la cumbre que arranca este martes.
“Acá en la Argentina hay mucha gente que viene escapando del régimen de Nicolás Maduro, que escapa de los crímenes de lesa humanidad que hoy están siendo investigados en la Corte Penal Internacional», dijo un venezolano presente el domingo citado por el diario Clarín. Patricia Bullrich, presidenta del partido Propuesta Republicana -PRO- y exministra de Seguridad participó junto a otros miembros de su partido. Bullrich, quien de acuerdo a Clarín «presentó un pedido a la oficina argentina de la DEA para que detenga a Maduro cuando llegue al país», le declaró al diario La Nación: «Vengo por los venezolanos que están en Argentina y otras partes del mundo, ya que debieron huir de una dictadura y no queremos que la Argentina reciba dictadores. Hemos planteado todas las opciones legales como para que Maduro sea detenido por la universalidad de los Derechos Humanos y también por las causas que tiene por narcotráfico».
Además de la solicitud de Bullrich, el Foro Argentino para la Democracia en la Región (Fader), encabezado por el diputado Waldo Wolff, también del PRO, impulsó una denuncia tanto contra Maduro como contra el dictador cubano Miguel Díaz-Canel y contra el dictador nicaragüense Daniel Ortega. Un abogado penalista también amplió en tribunales la denuncia contra Maduro y pidió que fuera citado a indagatoria de manera urgente por violación a los derechos humanos.
El Foro Argentino para la Democracia en la Región celebró como un triunfo la cancelación a último momento del viaje de Maduro: «El dictador de Venezuela, Nicolás Maduro, acaba de cancelar su visita a la Argentina con motivo de la cumbre de la CELAC, una visita que nunca debió ni siquiera estar planteada. El régimen que encabeza Maduro ha cometido y sigue cometiendo delitos de lesa humanidad hoy investigados por la Corte Penal Internacional, a ese criminal es a quien nuestro presidente ha invitado a la Argentina», dice un comunicado del Fader difundido este lunes.
Allí también se lee: «Haber logrado que este dictador no pise suelo argentino fue obra de la presión de la comunidad venezolana, del pueblo argentino y de los demócratas y defensores de derechos humanos, y en particular de la denuncia penal que impulsamos desde este Foro para que la Justicia argentina investigue sus crímenes de lesa humanidad».
En el documento lamentan, sin embargo, la presencia de las comitivas de Nicaragua y Cuba.
El gobierno argentino, pese a todo, hasta ahora no descarta la posibilidad de una visita «sorpresa» del mandatario venezolano.
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