El Metropolitano de Lara como debe ser
Apartando el resultado adverso de 0-2 en el amistoso ante Colombia, la cita de la vinotinto femenina en Cabudare fue una buena ocasión para constatar los trabajos de recuperación del estadio Metropolitano
Apartando el resultado adverso de 0-2 en el amistoso ante Colombia, la cita de la vinotinto femenina en Cabudare fue una buena ocasión para constatar los trabajos de recuperación del estadio Metropolitano
Es realmente interesante el caso venezolano: a cualquier noticia positiva le damos la vuelta, le encontramos el “dark side”, buscamos el perfil feo del asunto. Analizar esa situación va por otro lado, pero aquí estamos escribiendo estas líneas para alegrarnos por lo vivido la noche del jueves en Cabudare.
El estadio Metropolitano de Lara, ese bloque enorme de hormigón rojo que saluda a los viajeros del llano que entran a Barquisimeto, se mostró de nuevo vivo y útil a la Venezuela deportiva. Esa gigante edificación construida apenas hace 18 años, había sucumbido al olvido y el vandalismo. Sin siquiera haber sido terminado para la Copa América de 2007, el coloso de Cabudare rápidamente dejó de prestar sus servicios porque nadie quiso hacerse cargo de tamaña responsabilidad: terminarlo, mantenerlo y hacerlo rentable.
El jueves, el Metropolitano regresó para mostrarse, ahora sí, más cercano a lo que han dicho muchos desde su inauguración: que los planos usados para su construcción son los mismos del llamado «Teatro de los Sueños» de Manchester, el Old Trafford, el viejo campo del United.
Una grama nueva (que aún está siendo tratada), camerinos de estadio cinco estrellas, palcos, áreas VIP, área de prensa, pasillos, baños, banquillos. Todo mejorado y renovado. Algo que debió hacerse hace mucho tiempo, fue atendido después de que el pillaje lo masacrara y le dejara casi en ruinas. El trabajo conjunto de la empresa privada y el Estado, sirvió para que, como debe ser, esa alianza tan difícil de lograr en nuestro país, atendiera esa necesidad.
La contraloría social ahora deberá velar porque no vuelva al olvido tan hermoso escenario. Darle vida, aprovechar su ubicación geográfica para rentabilizarlo, en un país donde el Monumental de Caracas es ejemplo de cómo darle rendimiento a estos antiguos “elegantes blancos”, debe ser la premisa.
El jueves se mostró este estadio como el principal contendiente del otro Monumental, el de Maturín, para albergar a las selecciones nacionales de fútbol. Cabudare es encrucijada de todo el occidente del país: salvo para Oriente, de cualquier parte se puede llegar por tierra, la oferta hotelera es enorme y el aeropuerto aguanta el tráfico aéreo que demanda hoy día la Vinotinto. El público responde: en un amistoso de la selección femenina, sin la presencia de Deyna Castellanos (su poder de convocatoria es impresionante) y un día laborable, se acercaron casi 25 mil almas a los graderíos de un estadio que exhibe como ventaja la cercanía del aficionado con el campo de juego.
¿Cuáles son las razones para que el Metropolitano sea, potencialmente, el principal estadio de fútbol del país?
Lara es un estado que quedó huérfano de fútbol con la desaparición irresponsable del Deportivo Lara, pero la recuperación del Metropolitano sirve para estimular la posibilidad de que algún inversor serio se acerque de nuevo al fútbol profesional de esa localidad.
Ojalá que los que invirtieron sientan como propio ese Estadio. Que se convierta en lo que debe ser: un escenario futbolístico con otros propósitos productivos también.