Consumo

Consumidores piden que con el aumento de precios aparezca la comida

El incremento en los precios de algunos de los productos regulados no tomó por sorpresa a los consumidores. Se prepararon y algunos amanecieron en las colas para aprovechar lo que creen serán los últimos alimentos que adquirirán a los precios actuales.

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«Como el gobierno anunció los nuevos precios de los principales rubros de la cesta básica y productos de aseo personal, ya el salario mínimo se terminó de convertir en sal y sagua, ahora esperamos que ya con el incremento de los precios aparezcan nuevamente los alimentos en los anaqueles de los establecimientos, ya que nos encontramos desesperados por la falta de comida”, dijo Carmen Padillo, quien pacientemente realizaba una cola en la zona de Quinta Crespo para comprar pollo y otros alimentos.

Este martes las colas en supermercados, mercados y demás centros de acopio que expenden productos regulados amanecieron más largas que de costumbre, después de conocerse los incrementos de precios autorizados por el Gobierno.

José González se paró bien temprano para hacer la cola en un popular comercio de venta de pollos en la zona de Quinta Crespo, en donde la cartelera de precios no refleja los precios regulados del producto a Bs 850. Por el contrario, lo ofrecían desde hace varios meses a Bs 1.900.

“Aquí nunca hemos comprado el pollo a precio regulado, pero sí un poco más barato que en otros comercios. Se mantiene el precio de la semana pasada de Bs 1.900 por el kilo de muslo, Bs 3.200 por la milanesa y Bs 2.800 por la pechuga. Me vine bien temprano porque mi esposa me pidió que comprara para el resto del mes, ya que estamos seguros que si antes el pollo estaba regulado a Bs 65 por kilo y lo estábamos comprando en Bs 1.900 y ahora que lo colocaron a Bs 850, va a tener un aumento significativo. Es mentira el precio regulado, eso solo se consigue en los locales del gobierno”, dijo González.

María Torrelles esperaba en una cola sin saber qué iba a comprar. «Me enteré del aumento de los precios de la comida, hoy amanecí más pobre, tendré que comprar menos alimentos, pero en medio de la crisis ojalá que con estos aumentos, se consiga la comida ya que ni con el dinero en la cartera puedes comprar nada”.

Desde las 6:00 am José Rafael Álvarez hizo cola en una fábrica de pastas ubicada en Quinta Crespo, donde le aseguraron que le venderían dos kilos del producto. “Esto es una locura, el salario no alcanza para nada, no se consiguen los alimentos, estamos comiendo muy mal, las colas cada día son más largas y la esperanza de poder comprar son mínimas, no puedo entender cómo llevaron a Venezuela, un país rico productor de tantos alimentos y ahora no tenemos qué comer”.

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