Mercados

¿Qué hacer ante el inminente alza de las tasas de interés en EEUU?

Analistas han recomendado orientar las carteras de inversión de bonos hacia títulos de alta calidad crediticia y de menor duración, con el objetivo de reducir el posible impacto del inicio de subida de tasas.

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Dolares cuatro

“Muchos emisores han reforzado sus balances y estructuras de costo y han penetrado mercados de manera nunca antes vista. Igualmente los emisores soberanos han implementado políticas de disciplina fiscal con las excepciones notorias de países como Venezuela y Argentina”, explica David Osio, CEO de Davos Financial Group

El Tesoro Americano, bajo la tutela de Yanet Yellen, ha indicado que después de más de 9 años sin subir las tasas de interés, está listo para iniciar a partir de septiembre un ciclo de alzas. Estas indicaciones llegan a pesar de un crecimiento económico tímido, reducción moderada en los niveles de desempleo e inflación por debajo de los promedios históricos.

Pareciera que la medida obedece a fuerzas no necesariamente visibles ahora sino que más bien obedecen a una movida táctica: la Reserva Federal en este momento ha agotado su capacidad de maniobra para mantener el crecimiento económico de manera sustentable, y los mercados han estado soportados por una política de dinero barato y una altísima inyección de liquidez. Bajo este escenario, la medida parece ser de naturaleza preventiva.

En el año 2013, cuando el entonces jefe de la reserva federal, Ben Bernanke, insinuó aumentos en los tipos de tasas, se generó una reacción inesperada en los mercados con tres oscilaciones de entre 5% y 10% en los mercados de acciones y de similar proporción en los mercados de deuda. Definitivamente fue una señal de que los mercados asumían una continuidad en los programas de compra de títulos como medida adicional a la baja de tasas.

Es lógico que la Reserva Federal Americana, que aumentó sus niveles de balances de manera inédita para superar la crisis financiera del 2008, tome las medidas preventivas necesarias para normalizar la situación.

En su momento se hablaba de contrarrestar el aumento del endeudamiento por la vía del crecimiento el cual ciertamente no ha venido en la magnitud esperada. El resultado han sido valuaciones altas de activos, principalmente títulos valores y activos fijos como bienes raíces, pero sin el crecimiento de salarios y aumentos de consumo que se tenía proyectado. El estado se ve necesitado de impulsar políticas que promuevan un crecimiento sustentable y con tasas cercanas al cero por ciento no hay espacio de maniobra.

Una de las áreas de mayor vulnerabilidad son los títulos de deuda emergente denominados en dólares. La presión sobre bonos de mercados emergentes ha aumentado significativamente debido al bajo consumo en mercados desarrollados y menores precios de los commodities (lo cual resulta en menor valor de las exportaciones de energía y materiales), acentuado con un alza en el precio relativo del dólar americano.

La reacción inmediata de los inversionistas ha sido la de liquidar posiciones de mediano a largo plazo, esperando el momento de volver a entrar a tasas más atractivas. También ha habido una rotación acentuada alejándose de sectores como energía y metales, hacia otras alternativas menos vulnerables.

Sin embargo, de acuerdo a Andrés Coles, Director de Davos Financial Advisors, la esperada alza de tasas posiblemente no afecte de manera desmedida a todos los títulos de deuda emergente sino mas bien creará dispersión entre industrias, emisores y monedas en particular. Como categoría se estima que los rendimientos serán más atractivos que los títulos de deuda de mercados desarrollados que a pesar de las alzas no terminaran generando retornos interesantes.

Al respecto, David Osio, CEO de Davos Financial Group añade: “El crecimiento económico, criterio fundamental para una política de expansión económica, significa que se espera mejoras y por ende demanda de productos, materiales y servicios que hoy día, más que nunca, provienen de mercados emergentes. Al final el mundo está mucho más interconectado e interdependiente que en cualquier ciclo económico anterior a la crisis del 2008”.

“Muchos emisores han reforzado sus balances y estructuras de costo y han penetrado mercados de manera nunca antes vista. Igualmente los emisores soberanos han implementado políticas de disciplina fiscal con las excepciones notorias de países como Venezuela y Argentina», explica David Osio.

En acciones, ven compañías de los sectores de consumo masivo, salud y financieras como los que ofrecen mayor potencial de apreciación, aunque estos movimientos ya han comenzado a darse durante el segundo trimestre del año. Las colocaciones a hedge funds también prometen una mejor relación de riesgo beneficio por su capacidad de capturar oportunidades puntuales en eventos corporativos y de índole temático.

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