En lo que va de año, se presentaron un récord de 1.137 solicitudes de protección por bancarrota en el país, comparado con las 775 en el mismo periodo del año anterior. Mientras que los pedidos para comenzar reorganizaciones de la deuda en tribunales subieron a 122 frente a los 57 de hace un año, señaló Serasa.
«La intensificación de un escenario en recesión, unas tasas de interés más altas para la financiación y un incremento de los costos de producción generados por el fortalecimiento del dólar están afectando a la capacidad financiera de las compañías», indicó el estudio.
Las compañías pequeñas lideraron el listado de enero-noviembre, con 589 pedidos, seguidas por las firmas mediadas, con 327. Serasa agregó que 221 empresas grandes buscaron protección frente a sus acreedores en el periodo, reseñó la agencia Reuters.
El Gobierno informó el martes que el Producto Interno Bruto, la suma de todos los bienes y servicios producidos en el país, se contrajo 1,7% en el tercer trimestre, por encima de lo previsto. En una base anual, la economía de 1,5 billones de dólares de Brasil se contrajo 4,5%.