Irazú: la cara futurista del pop venezolano
La cantante venezolana se encuentra en el país promocionando su trilogía "De Otra Dimensión", producción que en 2018 se impuso como número uno en las radios nacionales
La cantante venezolana se encuentra en el país promocionando su trilogía "De Otra Dimensión", producción que en 2018 se impuso como número uno en las radios nacionales
Luego de que su primer trabajo «Sin Límites» escalara hasta la cima de la cartelera radial, la cantante venezolana Irazú regresó el año pasado para repetir la proeza, entonces con una balada romántica para enamorar al público nacional.
Esta nueva oferta guardaba puntos en común con su primer disco. En ambas producciones, la cantante se mantiene fiel a sus raíces pop, aunque se percibe una cierta diferencia entre ambas eras.
«Hay un cambio de imagen, pero no se separa de la idea principal: buscar algo característico que rompa con lo que ya hay en el mercado», explicó la compositora.
Un estilo futurista y como «sacado de comics», ese es el sello que Irazú asegura que ha plasmado en su nuevo trabajo discográfico. No es casualidad que vaya de la mano con la narrativa de este nuevo producto musical que trata al amor como un sentimiento «De Otra Dimensión».
Este tema, una balada pop que presenta al amor desde una perspectiva dulce y platónica, vio la luz en el 2018, año en que escaló hasta el primer puesto en el top radial venezolano.
La producción estuvo en las manos de Hildemaro Hernández, productor que ha trabajado con artistas de la talla de Shakira y David Bisbal.
«¡Te Quiero Ya!» y «Llama, por favor», son las piezas que completan la trilogía «De Otra Dimensión», con un notorio giro de estilos que coquetea con sonidos como el Electronic Dance Music y el Urbano Pop, respectivamente.
«Desde que hicimos la balada sentía la inquietud de probar sonidos nuevos», cuenta Irazú a El Estímulo. Asimismo, admite haberse sentido algo sorprendida al probar un género como el electrónico, el cual dista mucho de lo que acostumbra en sus anteriores proyectos. «Esto permite coquetear con este sonido que terminó obteniendo un resultado magistral».
También explica que estos dos temas no son simples traducciones de la balada original a ritmos diferentes.
La esencia de hablar del amor como un sentimiento «de otro planeta» se mantiene en las tres composiciones. No obstante, hay un cambio de letra que permite seguir la transición entre un amor idealizado y el momento en que se hace una realidad.
«Es una historia contada a través de tres canciones: la balada pop es una apuesta más poética y romántica, narra una historia de amor que incluso no se llega a materializar. Las otras dos dejan de hablar de un amor platónico para contar el momento en que por fin consigues a esa persona amada», argumenta al momento de describir el concepto de su nueva suite musical.
Si bien jugó con estos géneros, completamente nuevos para ella, la también compositora se encargó de mantener su estampa característica.
Irazú también reconoce que este es un terreno inhabitado actualmente en el mundo de la música venezolana, el cual está protagonizado por propuestas más cercanas al reggaeton y los ritmos urbanos.
«Las referencias de música pop en el país datan de los años setenta y ochenta. Kiara, Franco De Vita, Yordano… No existe una generación de relevo. Esa parte del mercado está por completo desatendida», señaló Irazú, quien se muestra comprometida con sacar adelante a un género que ha sido desatendido desde hace varias décadas.
«Creo que eso es parte del trabajo como artistas, ser transmisores de ese sentir colectivo que muchas veces las personas no saben expresar. Eso es lo que quiero ser yo, esa compañía incondicional; quiero ser parte de ese soundtrack que todos tenemos en la vida».
La cantante tiene muy claro el mensaje que espera dejar con esta trilogía y, en general, con su trabajo. Está decidida a entregarle al público material diverso y de calidad, y, a su vez, hacerse un espacio en el corazón de quienes la escuchan.