La elección 2022 se realizará el 16 de noviembre en el escenario de los grandes sucesos históricos del certamen como espectáculo musical en la época de Joaquín Riviera. Ahora se le anuncia como “un show de primer nivel, donde se hará sentir la tecnología”
La edición 2022 del certamen de Miss Venezuela será otra vez en el Poliedro de Caracas, según lo anunciaron el jueves 28 de julio, vía Instagram, Cisneros Media, Venevisión y la organización del concurso. La última vez que la ceremonia de elección se celebró en ese lugar fue en 2013. La fecha prevista para este año será el próximo 16 de noviembre.
El Miss Venezuela volverá al formato de24 candidatas oficiales, además de las franquicias estatales de Zulia, Monagas, Carabobo, Bolívar y Anzoátegui, estados que enviarán directamente a sus representantes.
Directivos de Venevisión y la empresa Advanta Producciones anunciaron que será un espectáculo a tono con los 70 años del certamen. El presidente del canal de La Colina, José Ramón de la Cotera, agradeció al presidente del Poliedro, Antonio “El Potro” Álvarez, por ser flexible “en cuanto a los plazos que necesita esta producción, ya que normalmente las fechas son muy comprometidas”. De Advanta Producciones se sabe que es una empresa que se dedica al montaje de eventos (tarimas, sonido, video e iluminación).
El mayor recinto para espectáculos en la ciudad (tiene un aforo de 13.500 personas sentadas y 15.000 en su total capacidad), estuvo habilitado, desde marzo de 2020 y hasta hace pocos meses como hospital para atender a pacientes de covid 19.
En los últimos meses fue sometido a labores de restauración y se “preinauguró” en junio pasado con un Festival de Salsa, patrocinado por la Presidencia de la República.
En su casi medio siglo de actividad el Poliedro ha sido “caja de resonancia de la evolución musical de Venezuela y el mundo”, según lo afirmó Félix Allueva, presidente de la Fundación Nuevas Bandas, en un reportaje que publicamos en El Estímulo en agosto de 2020, con motivo de su cierre para atender la emergencia de la pandemia.
Han pasado por su escenario las más relevantes luminarias de la música, tanto nacional como internacional, configurando una historia notable, llena de sucesos, retos, buenos momentos y otros que no lo fueron tanto.
“La decadencia del Poliedro fue progresiva. Empezaron a gerenciarlo desde una perspectiva política e ideológica. La programación cambió y el entorno se tornó muy agresivo e inseguro. Si salías de madrugada, tenías la posibilidad de ser atracado. Se convirtió en zona roja. El matraqueo también alejó a los empresarios. Es un buen reflejo de cómo se deterioró todo en el país”, expresó entonces Allueva.
En 1995, bajo la presidencia de William López (1994-2001), nace la Fundación Poliedro de Caracas. A partir de entonces, todo el dinero que entraba iba a una cuenta a nombre del Poliedro “y así comienza una gestión exitosa”.
-Ya para 1998 todo estaba marchando bien -sostuvo en la nota aludida López, hoy presidente de la Fundación Rajatabla- . Laura Pausini fue la primera artista que se presentó bajo mi administración. Luego pasaron por allí, entre muchos otros, Maná, Miguel Bosé, Metallica, Shakira, Luis Miguel, el mago David Coppperfield, Juan Gabriel y varios espectáculos de las ediciones sucesivas del Festival Internacional de Teatro que se hicieron durante mi gestión. También, el Disney On Ice, Eros Ramazzotti, Whitney Housten, Carlos Vives, Luis Enrique, los Meridiano de Oro todos los años desde que llegué, así como la elección de Miss Venezuela, que hicimos a través de un convenio con Venevisión por un precio especial, a cambio de promoción, pues me convenía publicitar el Poliedro.
Antes de ese convenio, ya se habían hecho en el Poliedro las ceremonias de Miss Venezuela correspondientes a los años 1975 (Maritza Pineda), 1989 (Eva Lisa Ljung), 1990 (Andreína Goetz Blohn), 1991 (Carolina Izsak) y 1992 (Milka Chulina).
Mirla Castellanos, una de las figuras artísticas que más se presentaron en los espectáculos del Miss Venezuela en su época de mayor esplendor, cuando los producía Joaquín Riviera, el gran hacedor de musicales televisivos en nuestro país, destacó que el escenario del coso de La Rinconada era sencillamente “espectacular”, tal y como lo describió:
«El del Poliedro es un escenario fabuloso, por sus dimensiones en tarima, lo que facilita la realización de producciones a lo grande. Estoy orgullosa de haber participado en algunas realmente fastuosas, de lujo, como las del Miss Venezuela, de un nivel supremo».
Mirla Castellanos
-Y no solo eso -puntualizó la cantante-, los periodistas e invitados especiales que venían de afuera quedaban maravillados con lo que allí veían. Me acuerdo que le hice un comentario a alguien de la producción del certamen, en un ensayo, preguntándole las razones por las que todos los años los invitados extranjeros venían a ver el concurso y se afanaban por ello. Y él me respondió: “Vienen por dos curiosidades: porque dicen que sabemos elegir a quien va a ser Miss Universo o Miss Mundo, o se lucirá destacadamente en ambos certámenes. Eso es un punto muy importante. Y segundo, por la gran magnitud del local, que realmente los impresionaba, y de lo que Joaquín Riviera era capaz de lograr con su afiebrada imaginación, con carros en escena, animales, gimnastas, grupos folklóricos, aquel derroche de bailarines, figurantes y efectos de todo tipo para hacer lucir estupendas a las misses participantes”.
-No salían de su asombre cuando se daban cuenta de la espectacularidad del techo y la disposición de las gradas alrededor, con aquel sonido, aquella escenografía, aquellas luces, aquel desplazamiento artístico, tanto de bailarines, cantantes, músicos y de todo aquello que Joaquín inventaba. Para ellos era como un gran hallazgo noticioso todo lo que servía de marco a la elección de Miss Venezuela.
Similar opinión a la de Mirla manifestó la actriz Carolina Perpetuo:
-Como artista, y después de haber sido tantas veces público, poder conocer las instalaciones tras bastidores y trabajar allí fue un lujo, una delicia -destacó entusiastamente-. Primero lo hice en el Miss Venezuela, en un homenaje que nos tributaron a las misses de 1986, junto a Raquel Lares, Mayte Delgado y, en la distancia desde Buenos Aires, Catherine Fulop. Y en otra ocasión, en 1995, participé en un segmento musical con varias actrices ataviadas a lo Marilyn Monroe.
-Trabajar allí bajo la batuta de Joaquín Riviera era una garantía de éxito, porque era un hombre muy organizado con su trabajo, muy disciplinado, muy estricto, al que no se le escapaba ningún detalle. Sus producciones eran impecables. Todo estaba muy bien articulado y pautado, desde la hora de llegada hasta los ensayos, realmente arduos. Para cualquier artista actuar en ese escenario es todo un lujo. Y ni hablar de cuando lo vives en vivo, con ese público tan entusiasta. La adrenalina es intensísima, a millón, máxima. Salir ante toda esa cantidad de público es una indescriptible e intensa experiencia. Otra vez fui como jurado, en el Miss Venezuela 2005. El Poliedro, sin duda, guarda grandiosas memorias de Caracas y del acontecer artístico venezolano.
1975. Maritza Pineda (25 de junio).
1989. Eva Lisa Ljung (16 de febrero).
1990. Andreína Goetz Blohn (1 de febrero).
1991. Carolina Iszak (23 de mayo).
1992. Milka Chulina (9 de septiembre).
1995. Alicia Machado (27 de septiembre).
1996. Marena Bencomo (6 de septiembre).
1997. Veruska Ramírez (12 de septiembre).
1998. Carolina Indriago (11 de septiembre).
1999. Martina Thorogood (10 de septiembre).
2000. Eva Ekvall (8 de septiembre).
2001. Cynthia Lander (14 de septiembre).
2002. Mariángel Ruiz (20 de septiembre).
2004. Mónica Spear (23 de septiembre).
2005. Jictzad Viña (15 de septiembre).
2006. Ly-Jonaitis (14 de septiembre).
2007. Dayana Mendoza (13 de septiembre).
2008. Stefanía Fernández (10 de septiembre).
2009. Marelisa Gibson (24 de septiembre).
2013. Migbelis Castellanos (10 de octubre).
Vale destacar que los espectáculos del Miss Venezuela en los últimos años, muy modestos y con evidente economía de recursos, se realizaban en las muy reducidas dimensiones de un estudio de Venevisión, lo que les restaba la espectacularidad que ostentaban en la época de Joaquín Riviera.
Las críticas se enfocaban en lo poco relevante de los artistas participantes en el espectáculo. Tampoco se salvaban de las críticas los animadores actuales, “ninguno de los cuales tiene la estatura profesional de los anteriores conductores del certamen”, como Gilberto Correa, Daniel Sarcos, Carmen Victoria Pérez, Bárbara Palacios y Maite Delgado.
Ahora vale suponer que, al retornar al escenario del Poliedro de Caracas, la producción volverá a ostentar la espectacularidad perdida. Así por lo menos lo insinuó José Ramón de la Cotera, presidente de Venevisión, al anunciar que el show de los 70 años del Miss Venezuela viene con todo.
-Se está planificando una producción que implemente nuevas posibilidades, tanto de tecnología como del nuevo estilo que tienen los concursos de belleza.
Mahmoud Bachir Handous, presidente de Advanta Producciones, complementó esta prometedora declaración:
-Se vienen muchísimas sorpresas para la gran noche final, un show de primer nivel, donde se va a sentir la tecnología. Tenemos un capital humano de productores, quienes en conjunto con los productores del Miss Venezuela, están armando algo espectacular que va a dar mucho de qué hablar.
A todo esto se une que el show se llevará a cabo de la mano del director de televisión y productor general del Miss Venezuela, Erick Simonato, aventajado alumno de Joaquín Riviera.
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