Trabajadores de empresas del Estado manifestaron pacíficamente este viernes 21 de septiembre a las afueras de la Inspectoría del Trabajo Dr. Pipo Arteaga de Valencia por diversas solicitudes, como revisión de cláusulas que son vulneradas de sus contratos, hasta por la paralización de sus sitios de labores.
Agentes de la Guardia Nacional Bolivariana dispersaron con bombas lacrimógenas una protesta por falta de comida en el local del estatal Abasto Bicentenario ubicado en la urbanización Terrazas del Ávila, en el este de Caracas.
Con la constitución del comité de licitación para la venta y permuta de bienes públicos de la Red de Abastos Bicentenario (Rabsa), se cierra otro capítulo en la historia de la cadena, que parece más cerca de su fin.]]>
Un pequeño ejército de trabajadores con camisas rojas friega los suelos de linóleo ante la mirada de sus supervisores, sentados bajo un enorme retrato de Hugo Chávez. Para una economía tan deteriorada como la venezolana, los anaqueles que hay en torno a los empleados en el supermercado Bicentenario, gestionado por el Estado en el este de Caracas, están rebosantes de productos básicos como arroz y pasta.
Desde tempranas horas de este sábado una multitud de personas se apostó a las afueras del Abasto Bicentenario, ubicado en Terrazas del Ávila, municipio Sucre (Miranda), para comprar comida ocasionado dificultades en el tráfico de las vías adyacentes.
El gobierno ordenó la reestructuración de la Misión Alimentación en una sola megacorporación que abarque todas las operaciones del sistema público de distribución y comercialización de alimentos.
Establecimientos como Pdval y Abastos Bicentenario han recibido más mercancía de lo que habitualmente les llegaba al día, de acuerdo con encargados de estos locales, consultados por Elestimulo.com.