Corruptos anónimos, S.A.
Cuando termine de caer el régimen chavo-madurista, habrá mucho por hacer. Tendremos que trabajar en la reconstrucción del país en todos los ámbitos. Pero si de verdad queremos evitar que algo así como lo que nos pasó no nos vuelva a suceder, tiene que haber justicia. Y para que haya justicia los nuevos gobernantes tienen que estar dispuestos a hacer –con carácter de urgencia- dos tareas primordiales: la primera, no deberle nada a nadie en términos de favores. La segunda, caiga quien caiga, castigar a los corruptos y asesinos.