Los representantes de la coalición universitaria, que participa en un diálogo nacional en Nicaragua para superar una crisis que se ha cobrado la vida de al menos 61 personas desde hace un mes, denunciaron esta sábado que sus vidas están en peligro y solicitaron a la CIDH que dicte medidas cautelares.
«Nuestras vidas están en peligro», dijo en rueda de prensa Madelaine Caracas Marín, una de las dirigentes de la coalición universitaria.
«Hemos sido amenazados cada uno de los que estamos aquí», afirmó.
Aseguró que la emisora La Nueva Radio Ya, afín al gobierno, divulgó a través de una red social fotografías de miembros de esa coalición, con sus datos personales y el nombre de sus padres, «y eso es algo que nos pone en riesgo».
Indicó que han solicitado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dicte medidas cautelares a su favor de forma urgente.
Asimismo, en un pronunciamiento esa coalición confirmó que denunciaron ante los representantes de la CIDH a la ministra de Salud, Sonia Castro, «por ordenar al cuerpo médico de los hospitales públicos no atender a los heridos, negar la atención gratuita a la población y manipular las actas de defunción de las personas asesinadas».
También rechazaron la presencia de la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN) y del Centro Universitario de la Universidad Nacional (CUUN) en la mesa del diálogo, y exigieron la abolición de estas estructuras «y una investigación de los abusos y actos de corrupción cometidos por sus líderes».
«Además, exigimos una investigación que determine el nivel de complicidad de sus líderes de estas expresiones en la brutal represión desatada por la Policía Nacional y fuerzas de choque de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) que resultó en la muerte de tres estudiantes», agregaron.
Por otro lado, denunciaron «la corrupción, abusos de poder y arbitrariedades cometidos por Telemaco Talavera, presidente del Consejo Nacional de Universidades y rector de la Universidad Nacional Agraria; Ramona Rodríguez Pérez, rectora de la UNAN-Managua, y Flor de María Valle Espinoza, rectora de la UNAN-León».
Pidieron a la Conferencia Episcopal que todas las rondas del diálogo nacional sean transmitidas en vivo en televisión nacional «para darle la oportunidad al pueblo nicaragüense de fiscalizar y estar enterados de las discusiones que se dan en dicha mesa».
Asimismo, llamaron a la población a movilizarse y expresarse pacíficamente este fin de semana asistiendo a las manifestaciones convocadas.
Las partes que participan en esa mesa de diálogo nacional se comprometieron el viernes a detener los actos de violencia y anunciaron una tregua de dos días.
Nicaragua cumplió 32 días de una crisis que ha dejado entre 61 y 65 muertos, según cifras de organizaciones humanitarias.
La crisis incluye multitudinarias manifestaciones a favor y en contra del presidente Daniel Ortega, que comenzaron con protestas en oposición a unas fallidas reformas a la seguridad social y que continuaron debido a las víctimas mortales de los actos represivos.]]>
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