Condenan torturas a médicos Marulanda y Aguado por cuerpos de seguridad

La doctora Andy Delgado asumió la vocería en nombre de la AVS y recalcó que con las distintas oleadas de protestas han aparecido numerosos casos de torturas en la que el gremio médico se vio afectado. Aguado y Marulanda no son los únicos, a estos se le suman casos en Táchira y en Carabobo, específicamente los de la Ciudad Hospitalaria Dr. Enrique Tejera.
La galena leyó ante las los medios el comunicado en el que rechazaron las detenciones, así como las torturas que les han aplicado y que comprometen su desempeño, tanto físico como psicológico.
Delgado detalló que en el caso de Marulanda la situación es delicada. «Sufre de problemas auditivos, así como lesiones en las muñecas, producto del uso de esposas que comprometen la sensibilidad y movilidad del miembro, mientras sus pies presentan moretones».
Estos signos son, a juicio de la experta señales de tortura, porque además, según información que el gremio maneja, para hablar de tortura se deben cumplir varios factores los cuales se cumplen en esta ocasión: daño físico o psicológico, intención de hacer daño y que sea perpetrado por miembros del estado.

A diferencia de otros pronunciamientos, la ASV no pidió liberación, si no que sean llevados a juicio, pero por tribunales civiles y no militares. «Ellos deben pasar por el debido proceso y si no hicieron nada, lo cual sabemos, deben quedar en libertad».
En el caso del segundo médico, las situaciones son similares. Este además sufre de problemas de la tensión, por lo que su cuerpo es una bomba de tiempo, mientras las autoridades se niegan a brindarle ayuda médica, pese a sus condiciones.
La experta, quien también es abogada, enfatizó que hay una violación al Código Procesal Penal, debido a todo lo realizado desde la detención, así como la prohibición de visitas, hasta las constantes audiencias diferidas.
Marulanda fue detenido el 20 de mayo de 2018 mientras desayunaba en un local. Lego de eso no se supo de su paradero, hasta cuatro días después. En el caso de Aguado, su detención fue el 16 de enero cuando los cuerpos de seguridad abatieron a Oscar Pérez en una de sus propiedades en El Junquito.
El gremio aseguró que sus colegas fueron detenidos por razones políticas, puesto que sus expedientes no muestran razones para el proceso que transitan.]]>