En una asamblea nacional de transportistas, conductores presentaron el balance en el que se encuentran la mayoría de los autobuses de Venezuela. Cerca de 75% de las unidades está paralizado por diversas razones y, si no se invierte en corregir las fallas, en 90 días el paro técnico será total.
La asamblea se declaró en emergencia y decidió iniciar una «agresiva e intensa campaña de información» que dé cuenta de la situación de crisis del sector que seguirá agravándose y «va a implicar el colapso definitivo del transporte público».
José Sánchez, presidente encargado de la Federación de Transporte, dijo que las medidas tomadas por el gobierno de Nicolás Maduro son «simples paliativos» a la problemática de inseguridad y falta de repuestos.
Carmen Ruiz, miembro del comando integremial, aseguró que solicitarán al Ejecutivo que cree mecanismos que faciliten el subsidio directo a los estudiantes, a través de una tarjeta estudiantil y que se implemente un programa de bono de transporte para adultos de la tercera edad.
Además, los transportistas evaluarán futuros ajustes a la tarifa, que recientemente fue aumentada de 150 bolívares a 280 bolívares.
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