En una resolución emitida por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el ente internacional pide al gobierno de Nicolás Maduro "que adopte las medidas necesarias para proteger los derechos a la salud, vida e integridad personal del señor Juan Requesens en el contexto de privación de libertad en que se encuentra, asegurando que no sea objeto de actos de violencia en su contra"
Esta resolución nace de una solicitud recibida por la Comisión el pasado 17 de agosto en donde se le instaba al ente requerir «a la República Bolivariana de Venezuela la adopción de medidas necesrias para proteger los derechos de Juan Requesens. Los solicitantes alegaron que que el político se encuentra en «una situación de grave riesgo con motivo de las circustancias en que se encontraría privado de la libertad en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), el Helicoide en Caracas.
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Juan Requesens fue detenido el pasado 7 de agosto por funcionarios del cuerpo de inteligencia del país junto a su hermana Rafaela, quien fue puesta en libertad dos horas después.
Tres días después de la detención del legislador, el Gobierno difundió un video en el que se veía a Requesens, sentado frente a una cámara, asumiendo que formó parte en la organización del supuesto atentado, pero que actuó sin saber de qué se trataba, atendiendo a una solicitud del expresidente del Parlamento Julio Borges.
También circuló un segundo video en el que se ve a Requesens en ropa interior aparentemente manchada de excrementos, sin pronunciar palabra.
Su familia y abogado, que aseguran solo han podido verlo en una ocasión, califican su detención como “secuestro”.
La exclusión de Yoris suscitó fuertes críticas no solo de Estados Unidos, sino también de Colombia y Brasil, considerados aliados de Maduro
"Esa oficina se desvió. De ser una oficina de asesoría técnica que debe respetar las instituciones y más bien asesorar la reformas legales que el país necesita, asesorar las instituciones para que mejoren, de repente se transformó en una oficina de espionaje interno, de conspiración interna", dijo Maduro en su programa de televisión
El informe acusa al Estado de recurrir a "amenazas, vigilancia y hostigamiento constantes, a la difamación y a la censura" para "sofocar a la oposición"
