La sesión del 30 de octubre en la Asamblea Nacional se suspendió por falta de quórum, debido que la propuesta llevada por la fracción 16 de julio de declarar persona non grata al ex jefe del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, generó malestar en el seno del Parlamento.
Esta propuesta, que dicha fracción tiene realizando desde hace tres semanas, no ha sido debatida o negada de plano en el seno parlamentario. La primera vez se pidió esperar las resoluciones derivadas de las reuniones en la Unión Europea.
Para el diputado Biagio Pillieri, la suspensión del debate fue para no dar la discusión, aunque se abstuvo de adjudicar razones políticas. Aún así, Pilieri y la fracción 16J aseguraron que “seguirán insistiendo” y pedirán votación nominal para saber “quiénes son amigos de Zapatero y quiénes no lo somos”.
La respuesta a estos señalamientos llegaron por parte de Alfonso Marquina, Segundo vicepresidente de la Asamblea Nacional.
Según el parlamentario de Primero Justicia, el Poder Legislativo no tiene potestad legal para declarar persona non grata a nadie, pero considera que “es bueno dar el debate y dejar claro que Zapatero no está capacitado para ser un mediador. No hay condiciones para un diálogo (…) El gobierno lo utiliza para oxigenarse (…) El único diálogo es para el cambio de gobierno”.
Además, indicó que la posición de la tolda aurinegra es “firme” en cuanto al tema de un eventual diálogo. Aseguró que “todo Primero Justicia” apoya las decisiones de la Unión Europea así como el hecho de que no existen condiciones para un nuevo diálogo.
Señaló que tendrán que discutir sobre cómo ayudar a los parlamentarios a quienes se les dificulta acudir a la Asamblea por problemas económicos que han originado la falta de quórum en reiteradas ocasiones.
La próxima sesión se verá si la presencia de Zapatero en el país y su participación en la política venezolana es debatida o no.
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"Consulta Popular" del proyecto de Ley que fiscaliza y regula la actividad de las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) en Venezuela arrancó este viernes con énfasis en presunciones de que estas entidades sirven para financiar a partidos políticos opositores, reciben fondos del imperialismo, lavan dinero y son una amenaza para el sistema.
Sin incidencia en las decisiones reales, sin capacidad de dictar leyes que se vayan a ejecutar realmente y sin sentido político de la oportunidad, al menos, para estar presentes en los debates de fondo del país, esta Asamblea Nacional-2015 es una triste entelequia
