Cabo Verde acepta proceso de extradición de Álex Saab
Según el diario El Tiempo de Bogotá, que cita fuentes del Gobierno de Estados Unidos, fue "aceptado formalmente el proceso de extradición" del presunto testaferro de Nicolás Maduro
Según el diario El Tiempo de Bogotá, que cita fuentes del Gobierno de Estados Unidos, fue "aceptado formalmente el proceso de extradición" del presunto testaferro de Nicolás Maduro
Álex Saab, señalado como testaferro de Nicolás Maduro y «agente especial del régimen venezolano», podría tener las horas contadas en Cabo Verde.
Según el diario El Tiempo de Bogotá, que cita fuentes del Gobierno de Estados Unidos, fue «aceptado formalmente el proceso de extradición del capturado Saab».
«La semana pasada se terminaron de traducir todos los documentos y Cabo Verde ya le notificó a Estados Unidos que aceptó el proceso de extradición, el cual se resolverá en los próximos días», dijo la fuente federal al diario colombiano, este 29 de junio.
La defensa de Saab puede apelar la decisión que tome Cabo Verde, pero los contactos del medio colombiano aseguran que «Washington está optimista sobre el envío del barranquillero, procesado por los delitos de lavado y corrupción vinculados al régimen venezolano».
Por otra parte, los mismos voceros le aseguraron al diario colombiano que, hasta el momento, «no hay fundamento en los procesos que se siguen contra Saab para vincularlo con la exguerrilla de las Farc»,
«Lo que sí confirmaron es que se indaga si Saab era el poder corruptor del régimen para comprar a opositores e incluso para intentar infiltrar a miembros de las Fuerzas Militares en Colombia», finaliza la página web del periódico colombiano.
Alex Naim Saab Morán nació en Barranquilla, Colombia, hace 48 años. En estos momentos está recluido en Cabo Verde, África, a donde viajó con un pasaporte venezolano.
A Saab se le acusa de corrupción a través de un programa de comida subsidiada en Venezuela y de ser el testaferro de Nicolás Maduro.
Este hombre de ascendencia libanesa es dueño de varias empresas. A través de su consorcio Group Grand Limited, constituido en Hong Kong, firmó contratos millonarios de dólares con el gobierno de Nicolás Maduro para promover las cajas que los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).
En la práctica, el CLAP son cajas con comida que se reparten en zonas bajas y medias de Venezuela, solo a personas afiliadas al «sistema Patria» de Maduro. En realidad es uno de los mecanismo de control político del gobierno venezolano. La calidad de sus productos ha sido cuestionada varias veces, además de ser comprados con sobreprecio, según una investigación de la Procuraduría General de México que, en su momento, divulgó la agencia EFE.