Empresas y Negocios

Buques de Conferry anclados en el país por riesgo de embargo

Conferry reportó que en 2014 tuvo "problemas de operatividad", debido a que de los 11 buques solo se le hizo mantenimiento a 2, incumpliendo con el plan de varada. La falta de divisas fue señalada como la principal razón. Sin embargo, las naves no pueden salir del país porque a dónde llegan pueden ser embargados por la deuda que mantienen con los bancos que prestaron el dinero para adquirirlos.

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La empresa, conocida ahora como La Nueva Conferry -producto de la expropiación del gobierno en 2011-, señala en la Memoria y Cuenta del Ministerio de Transporte Acuático y Aéreo que para la consecución de los planes de mantenimiento previstos en 2014 «surgieron serias dificultades como la tramitación rápida para la obtención de divisas con el fin de efectuar las compras de los repuestos tanto para el mantenimiento preventivo como el correctivo de los buques, en virtud de ser estos adquiridos en divisas (dólares y euros)».
Esto generó «problemas de operatividad» en los buques. Una fuente del sector explicó que el motivo por el cual los barcos no recibieron mantenimiento es porque no puede realizarse en el país. «Debe hacerse en grandes astilleros que no están en Venezuela», dijo. Pero incluso si se consiguen los recursos para llevarlos al exterior, la empresa administrada por el Estado se enfrenta a otro problema: un posible embargo.
El consultado señaló que esos barcos no pueden salir del país porque «a dónde llegan son confiscados debido a que persiste una deuda con los bancos que prestaron el dinero para adquirirlos». El Estado no las ha pagado, los antiguos dueños tampoco, por lo que cualquier embarcación propiedad de Conferry que toque territorio extranjero «se convierte en una garantía para el acreedor».
En la memoria y cuenta del año 2013 se hace referencia a esta situación y la listan como uno de los obstáculos de la empresa: «Endeudamiento financiero al momento de la expropiación, producto de los préstamos otorgados por la banca nacional y extranjera, cuya garantía son los bienes inmuebles y embarcaciones. El monto adeudado a la banca nacional: Bs 84.442.09,21 y a la banca extranjera, el equivalente a Bs 25.208.074,75″.
El documento detalla que en el mantenimiento correctivo (dique) que recibieron los dos buques se invirtieron Bs 25.694.757.
-Menos capacidad-
En su mejor momento -2006/2007-, Consolidada de Ferrys C.A. transportaba 8.000 personas diarias en tres embarcaciones grandes que operaban entre Puerto La Cruz y Punta de Piedras. Ahora, la misma cantidad se trasladada repartida entre las tres empresas navieras que viajan a la Isla de Margarita, incluyendo La Nueva Conferry.
Actualmente, la empresa expropiada maneja, de acuerdo con la fuente, un buque arrendado que hace viajes entre el puerto de Guanta, en el estado Anzoátegui, y El Guamache, ubicado al sureste de la Isla. Añadió que el problema es que el barco que opera la ruta no puede arribar al terminal en Punta de Piedras, preferido por la vieja Conferry, debido a que no tiene las dimensiones adecuadas.
Otro de los problemas reportados por Conferry en la memoria y cuenta del despacho es que los «usuarios del servicio no están concienciados sobre el cuidado y uso de los bienes abordo de los buques, lo que trae como consecuencia el deterioro de los mismos».
La fuente destacó que también ha bajado la demanda por los altos precios. En La Nueva Conferry, por ejemplo, un boleto de ida cuesta Bs 424 para un adulto. A esto se le suma el pasaje de autobús o, si se va en vehículo, Bs 840 (mínimo) por su traslado en la embarcación. «Es más cómodo y más corto irse en avión y la diferencia de precio no es tanta», señaló.]]>

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