El Año Nuevo es una época de reunión familiar en la cultura asiática. Esto implica que millones de personas vuelvan a sus ciudades de origen: las autoridades esperan que se produzcan casi 3.000 millones de viajes en el conocido como «Festival de la Primavera», el período de 40 días que arrancó el 13 de enero y terminará el 21 de febrero.
Entre las tradiciones más populares y simbólicas del también conocido «Festival de la Primavera» se encuentra la limpieza a fondo de la casa, que representa el deseo de deshacerse de las malas experiencias del pasado, así como despedir al año saliente y dar la bienvenida al entrante.
Todos los que siguen esta celeberación esperan que lleguen estas fechas en las que las reuniones familiares, los fuegos artificiales, el color rojo y la tradicional gala de la televisión central china hacen que, por un día, el país más poblado del mundo grite al unísono para desear que la buena fortuna sea la tónica dominante del año entrante.