Los pequeños empresarios en Nueva Esparta no solo están reportando una caída importante en sus ventas, sino la pérdida de algunos productos y hasta sus negocios. Los grandes comercios han comenzado a cuantificar esas pérdidas asegurando que pueden superar el millón de bolívares diarios.
El presidente de la Cámara de Comercio, Puerto Libre y Producción del estado Nueva Esparta, Edward Noguera, afirmó que los establecimientos comerciales de la isla están enfrentando muchas dificultades por la escasez de efectivo, que se agrava por los problemas existentes con las líneas telefónicas y especialmente con las bancarias, que impiden el normal y óptimo funcionamiento de los puntos de venta y la realización de transferencias al momento.
“El dinero existe como medio de pago y de transacción y al estar escaso indudablemente afecta el número de operaciones. A pesar de que muchos negocios aceptan transferencias no todos pueden hacerlo y pasa que muchos consumidores se cohíben de hacer las compras si no hay punto de venta o no funciona. Todo esto está impactando el consumo y las ventas”, dijo.
El representante empresarial indicó que esta realidad obliga al comerciante a pasar por un proceso de conciliación con los contadores, lo que genera un retroceso, que a su vez tiene un costo, que deben asumir para no paralizar sus operaciones y seguir atendiendo la demanda sin perder clientela.
– Emprendedores limitados –
Ante la crisis económica por la que está atravesando Venezuela, y en particular Margarita, han surgido en la isla diferentes ferias artesanales y de alimentos que ayudan a los emprendedores a generar recursos para mantener a sus familias. Ellos se están enfrentando sin muchas herramientas a la falta de efectivo que reina en las calles. La Cámara de Comercio no tiene una cifra exacta en este momento de cuánto los ha afectado esta situación, pero reconoce que los más perjudicados son los negocios pequeños que no tienen alternativas.
En estas ferias han tratado de centralizar los pagos y tener al menos uno o dos puntos de venta en los que la gente pueda cancelar sus productos, sin embargo, son muy pocos para la cantidad de puestos y las largas colas que se forman terminan por espantar a la gente.
“Gracias a Dios hemos tenido una buena cantidad de visitantes en los últimos dos sábados, pero también ha sido muy estresante porque en repetidas oportunidades no podemos vender nuestros productos ya sea por la falta de efectivo o porque los puntos del banco no funcionan. Los turistas y los residentes que vienen quieren disfrutar, conocer y comprar, no pasar una hora en una cola para pagar un refresco. Esto nos hace mucho daño, quién va a querer hacer turismo en estas condiciones”, comentó Cristina Sánchez, comerciante.
Esta ha obligado a los emprendedores y comerciantes a reinventarse una vez más para atender satisfactoriamente a su clientela y tratar de mantener a Margarita como un destino turístico atractivo y de calidad. Como estrategia algunos permiten que los compradores les hagan transferencias al momento de la compra o incluso después, gracias a lo cual han logrado completar varias transacciones, pero también han perdido porque los clientes luego no aparecen.
“Si son clientes habituales lo hacemos con más frecuencia. Muchos ya tienen nuestros datos registrados y eso facilita todo el proceso. El riesgo aparece cuando no los conocemos, ya han consumido algún producto y tenemos que confiar obligatoriamente en que volverán o cancelarán a través de la banca en internet. Eso ha hecho que algunos establecimientos cambien sus rutinas de trabajo y metodología de pagos, pidiendo que paguen casi al entrar”, manifestó un vendedor del Mercado de Arte de La Asunción que prefirió el anonimato.
– Clientes insatisfechos –
Quienes se encuentran en las calles no hacen más que expresar su descontento por toda la situación. Critican que los bancos no tengan papel moneda, al igual que los cajeros, y que los comercios que estaban dando avances de dinero ya no pueden hacerlo.
La Superintendencia de Instituciones del Sector Bancario (Sudeban) obligó a los locales comerciales a suspender cualquier acuerdo o servicio de retiro de efectivo a través de tarjetas de crédito o débito desde el 19 de agosto, alegando que con esta medida buscan combatir la escasez de efectivo que se ha agudizado en los últimos meses por “el contrabando hacia Colombia y la masificación de avances ilícitos de efectivo”.
“En vez de solucionar el problema lo empeoran, siguen violando el derecho al libre comercio, el de las personas a comprar lo que quieran y cuando quieran. Te obligan a comprar bolsas de comida con lo que el gobierno quiera y al precio que quiera y si trabajas fuertemente para comprar otras cosas en otros sitios tampoco puedes hacerlo porque ni tienes el efectivo, ni funcionan los puntos porque la tecnología venezolana es fatal. Esto es una locura”, expresó Maribel López, quien visita la isla por vacaciones.
Pese a todas las quejas los comerciantes insulares ratificaron su intención de trabajar por Nueva Esparta y dijeron que seguirán «haciendo magia» hasta que se los permitan, para resolver los problemas que se presenten.]]>
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