Anakarina Fajardo: ser La Pavlova

“El Benemérito y La Pavlova” muestra en escena lo que se considera que fue el origen del arte de la danza en Venezuela: la visita de la bailarina rusa Anna Pavlova, la más grande artista universal que, hasta aquel momento, había llegado a nuestro país.

La trama se desarrolla a partir de un encuentro secreto entre el general Juan Vicente Gómez y La Pavlova, en una discreta sala de espera del Gran Hotel de Caracas, en donde se hospedó la diva del ballet internacional luego de haberse presentado en el Teatro Municipal con la obra maestra “La muerte del cisne”, convirtiendo ese 17 de noviembre de 1917 en un hito para el impulso de la danza clásica en Venezuela.

Tal hecho causó una admiración tan grande que hasta Gómez, Presidente de la República en aquel tiempo y hombre asiduo a las artes, disfrutó del performance de la célebre invitada y le obsequió un cofre en cuya tapa se podía leer el nombre de La Pavlova armado en morocotas, monedas de oro de la época, como regalo por sus presentaciones triunfales bajo el cielo de este país.

Mi acercamiento a la pieza

En clave cómica de sainete, “El Benemérito y La Pavlova”, de Federico Pacanins, me reveló esta anécdota que, aun siendo bailarina, desconocía. La pieza de Pacanins está estructurada con una fusión de versos, música, canto y baile con datos históricos fieles a cuando la artista llegó a tierras venezolanas como parte de una gira mundial. Es un equilibrio entre realidad y ficción.

Versos de Job Pim, el “Pobre gallo bataraz” de Gardel y sonetos de Calcaño Herrera, son solo algunas de las pinceladas histórico-culturales que enmarcan el instante central de la obra: la ejecución de “La muerte del cisne”, célebre número de ballet clásico que ilustra los últimos momentos de un cisne herido y que tengo la responsabilidad de danzar fiel a la coreografía que Michel Fokine diseñó para la artista rusa, pero bajo una innovadora versión de la música de Camille Saint-Saëns.

La historia con esta obra, al menos en lo referente a ensayos, inició antes de la pandemia, en el 2019, y luego de la pausa a la que a todos nos forzó tal situación de emergencia sanitaria, finalmente, podremos ofrecerle a un público de diferentes generaciones este trabajo tan repleto de pasión y esmero.

Siempre valoro las oportunidades en las cuales puedo combinar teatro y danza sobre las tablas, ya que me permiten explorar distintos matices comunicacionales a través de la palabra y el movimiento. Antes de graduarme como Licenciada en Comunicación Social – Universidad Monteávila – y de especializarme en actuación – Escénica, Centro de Artes Integradas –, me titulé como bailarina clásica – Escuela de Ballet Clásico Petite –; en el presente, es la escena teatral la que, una y otra vez, me regala momentos de reencuentro con el baile, dejándome volver a las raíces de un arte que enseña disciplina y amor por la expresión no verbal. Ejemplos de esta mezcla teatral-dancística han sido mis trabajos en “Los 7 pecados capitales” – Anna II – de Kurt Weill y Bertolt Brecht; “Simón” – María Teresa del Toro – de Isaac Chocrón; “Pobrecito” – Dama – de Leoncio Martínez; “Romeo y Julieta” – Rosalinda – de William Shakespeare; “Una fiesta salvaje de Boris Vian” – Úrsula – de Federico Pacanins; “Delirio en Marienbad” – Ulrica – de Elizabeth Yrausquín de Postalian; entre otros.

En “El Benemérito y La Pavlova”, interpreto a Anna Pavlova, primera bailarina rusa de finales del siglo XIX y principios del XX, reconocida por ser una de las principales artistas del Ballet Imperial Ruso y de los Ballets Rusos de Serguéi Diáguilev; aparte de de ser famosa por su interpretación de “La muerte del cisne” y por haberse convertido en la primera bailarina en viajar por todo el mundo, incluyendo Sudamérica, India y Australia. Para mí es un reto encarnarla, por ser un personaje tan icónico en la historia mundial. La abordo desde el agradecimiento, conociendo su historia, pero planteando mi propia visión de ella hasta donde lo permiten las bondades del arte escénico y, por supuesto, la línea de la obra.

Responsables de la magia

Tengo el honor de formar parte de un elenco de lujo, encabezado por el primer actor Armando Cabrera, como el General Juan Vicente Gómez; la galardonada intérprete Valentina Garrido, encarnando a Auristela Chacón Flores, chaperona andina de la rusa; el cantante y actor Juan Carlos Grisal, encargado de Lino Tirado y Terán, trovador caraqueño contratado por el Benemérito para lisonjear a la artista de la danza; y la actuación especial de Sandra Yajure, quien personifica a Dionisia Bello y Dolores Amelia, las dos mujeres de Gómez que contextualizan con sus testimonios la vida personal de esta icónica figura política.

Detrás de escena, nuestro “departamento de magia”, como lo bautizamos hace poco, está compuesto por el gran Edisson Spinetti, quien, con la dirección de arte, la escenografía y el vestuario de la pieza, reafirma su cualidad de hombre renacentista; por Hernán Rosas, eslabón clave dentro de la iluminación y la asistencia de dirección; por Paola Martínez con toda su disposición y excelencia en la producción general y la asistencia de dirección; y, finalmente, por el maestro Federico Pacanins, capitán de este barco artístico que con su texto, dirección y puesta en escena, demuestra, una vez más, su compromiso por proponer iniciativas culturales que nos recuerdan cómo el pasado influye dentro de nuestro presente, en medio de un contexto en el cual pareciera que nos olvidamos, cada vez más, de aquellos que nos precedieron.

En Venezuela y, por consiguiente, en latitudes internacionales, lo que conocemos hoy día sobre la danza y el arte en general no sería igual sin la visita de la prima ballerina Pavlova al territorio venezolano en tiempos de Gómez. Estar rodeada de personas que son ejemplo de calidad humana y profesional, vuelve aún mayor la emoción de rendirle tributo a esta importante anécdota, cumpliendo con el compromiso de entrega y comunicación que tenemos los artistas.

Coordenadas: “El Benemérito y La Pavlova” se presentará en la sala de teatro del Trasnocho Cultural desde el 9 hasta el 18 de septiembre, viernes y sábados a las 4:30 P.M. y domingos a las 4:00 P.M. Las entradas pueden ser adquiridas en las taquillas del teatro y por ticketmundo.com.