Deportes

Neymar: amor, odio, gambetas y mucho ruido

Criticado o alabado, el juego y la actitud de Neymar no deja indiferentes a los fanáticos del fútbol. ¿Es el heredero de Pelé? Eso ya no debería importar. Lo único cierto es que es el motor de su equipo y le espera otra gran oportunidad en Catar

Neymar
Publicidad

Ansiosos de hallar al heredero del ‘jogo bonito’, muchos se arriesgaron a llamarlo el nuevo Pelé. Aunque su talento no admite duda, sus fallos para gambetear escándalos y polémicas lo alejaron del trono. La derrota en el Maracaná, un nuevo revés para Neymar.

Brasil activó sus perros de caza para rastrear un nuevo diamante luego de que la flama de Ronaldinho Gaúcho, Ronaldo, Rivaldo y Kaká estaba por apagarse o ya se había extinguido. La huella los llevó hacia el Santos, el equipo paulista donde ‘O Rei’ hizo historia y en el que un chico menudo jugaba como en el potrero.

Debutó con el Peixe en 2009, con 17 años, y al poco tiempo ya seguía la estela del llamado rey del fútbol. Encabezando una nueva camada de los ‘Meninos da Vila’, la famosa cantera albinegra, fue considerado el mejor jugador de la Copa Libertadores-2011 que le arrebató al uruguayo Peñarol.

«Neymar es mejor que Messi. Le pega bien con la zurda, con la diestra, es un excelente jugador», dijo Pelé después de que ‘Ney’ guiara al Santos a su primera Libertadores en medio siglo.

Neymar da Silva Santos Júnior, nacido en Mogi das Cruzes, en el estado de Sao Paulo, empezó a convivir muy temprano con la presión de superar al argentino y estar a la altura del legado del ’10’ brasileño.

El sábado en el templo del fútbol brasileño, Lionel Messi le arrancó la Copa América-2021. ‘Ney’ lloró desconsolado, pero al final se abrazó con su gran amigo que levantó su primer título con la Albiceleste.

La imagen «dice que existen adversarios, no enemigos», destacó Tite, el dolido técnico de Brasil.

Alegrías y enojos

Desde chico Neymar hizo piruetas dentro del gramado para el deleite de aficionados y el enojo de algunos rivales, contrariados, ayer y hoy, porque suelen ser provocadores.

También, desde muy joven, de dentro y fuera de las canchas le han criticado simulaciones y caídas estrambóticas.

«Perder o ganar es parte del juego. Simular una situación para tomar ventaja no lo es. Es un mal ejemplo para el muchacho que está creciendo», dijo Tite en 2012 luego de una acción en la que ‘Ney’ se vio involucrado durante un choque entre Corinthians y Santos.

Neymar
La marca argentina durante la final fue bastante dura contra el brasileño (MAURO PIMENTEL / AFP)

El agua corrió por el río y el actual entrenador de la ‘Seleçao’ ha sido, mayoritariamente, un escudero de su principal figura, considerada por la Conmebol el mejor jugador de la Copa América-2021 junto a Messi.

«Quizás esa forma en la que fue visto Neymar con Messi y otras tantas puedan mostrar la grandeza del deporte», reflexionó el DT después del ‘Maracanazo’.

Tras cuatro años en el Santos, donde alzó seis títulos, firmó con el Barcelona en un controvertido pase que le generó más de un dolor de cabeza a él y a las directivas culé. Con los catalanes (2013-17) formó una amistad y un tridente histórico con Messi y el uruguayo Luis Suárez.

Obtuvo ocho títulos, incluida una Champions League, pero se marchó al PSG, otra vez entre polémicas, en una transferencia récord de 222 millones de euros.

El brasileño justificó el traspaso en su deseo de ganar un Balón de Oro, que un brasileño no obtiene desde 2007 con Kaká. El sueño sigue pendiente.

Controversias en París

En el club parisino ha alzado diez trofeos, ninguno internacional, pero ha tenido desempeños irregulares en medio de lesiones, escándalos fiscales y señalamientos de violencia sexual.

Activo en sus redes sociales, donde tiene millones de seguidores, en Brasil su imagen divide.

«Neymar no es un ídolo consensual, es una figura muy controvertida. Tiene poco carisma, poco prestigio», explica el sociólogo Rodrigo Monteiro, de la Universidad Federal Fluminense.

Con la ‘verdeamarela’ debutó con gol en agosto de 2010 en un amistoso contra Estados Unidos. Desde entonces ha jugado 111 partidos y anotado 68 tantos, nueve menos que el récord de Pelé.

Neymar
(CARL DE SOUZA / AFP)

Jugó, con poco brillo, los mundiales de 2014 y 2018. Por lesión evitó la histórica derrota 7-1 contra Alemania en las semifinales del Mundial de Brasil, una marca indeleble para su generación.

Antes levantó la Copa Confederaciones-2013 y después la medalla olímpica en Rio-2016. Se perdió la victoria en la Copa América-2019 por otra dolencia física y dos años más tarde se le escapó la revancha.

Catar-2022, su objetivo recargado, lo encontraría con 30 años. Sería su pipa de la paz para reconciliarse con sus opositores y un brindis con quienes siempre lo apoyaron.

Publicidad
Publicidad