El gobierno de Nicolás Maduro recurre a las reservas internacionales en un contexto de sequía de divisas por el desplome de los precios petroleros en 2014 y que comenzó a sentirse con mayor fuerza a partir de abril, cuando empezó a cobrarse la factura de las exportaciones de diciembre, mes en el que los precios mostraron una pronunciada baja.
Las reservas internacionales al 13 de mayo se colocaron en $17.875 millones, una caída de 6,4% en el mes desde $19.024 millones y de 19% en el año desde los $22.080 millones en los que cerró 2014.
Las reservas, que garantizan el pago de deuda y de las importaciones, han descendido 13,2% desde el 13 de mayo de 2014.