El sindicato de los Teamsters (camioneros) votó la huelga el fin de semana. Choferes de cuatro empresas se plegaron a la medida de fuerza, pero no estaba claro cuántos de los 16.000 camioneros en los puertos de Los Ángeles y Long Beach suspenderían sus tareas. Se cree que la huelga no paralizará totalmente los puertos.
La vocera sindical Barb Maynard dijo que los conductores son víctimas del «robo persistente de sus salarios» porque los empleadores los tratan como contratistas independientes, no como empleados de las empresas.
La mayoría de los choferes son contratistas independientes de las compañías de transporte. Dicen que sus ingresos están disminuyendo, y que al ser empleados de tiempo completo de las empresas gozarían de sueldos más altos y mejores condiciones laborales.
Las compañías dicen que los choferes insatisfechos son una minoría ruidosa y que un paro sería desastroso en momentos que el sector apenas se recupera de una huelga reciente de los trabajadores portuarios.
Meses atrás, las negociaciones contractuales con los portuarios prácticamente paralizaron los puertos de mar desde San Diego hasta Seattle. El complejo portuario de Los Ángeles y Long Beach es la principal puerta del Pacífico para miles de millones de dólares anuales en comercio con Asia.]]>