Arribo de barcos a Puerto Cabello cayó 40% en enero

Apenas 28 buques con mercancías de diferente índole arribaron en el recién concluido primer mes de 2016 a Puerto Cabello, principal centro de entrada de productos importados de Venezuela, lo que significó una caída de 40% respecto al mismo mes de 2015 y de 80% respecto a enero de 2013, de acuerdo con datos del sector comercial y aduanero de esa entidad carabobeña.

“En enero de 2015 entraron 48 buques, 17 de ellos graneleros, pero este año solo entraron 28 barcos. Esto significa que está llegando mucho menos mercancía”, afirmó Félix Jiménez, presidente de la Cámara de Comercio de Puerto Cabello, quien precisó que ya en enero de 2015 el volumen del tráfico marítimo había tenido una fuerte contracción frente al mismo mes del año precedente.

Jiménez recodó que en todo 2015 la actividad comercial en el principal puerto nacional descendió más de 80% con la llegada de apenas unos 450.000 contenedores, lo que además representó que Puerto Cabello trabajó a menos de 38% de su capacidad operativa, estimada para 1,2 millones contenedores al año.

El vocero del gremio de comerciantes porteño recordó que del total de barcos que arribó el año pasado 80% correspondió a importaciones hechas por el Estado, y de esa cantidad 80% se relacionó con alimentos y productos esenciales para el consumo humano.

También señaló que muchos de los barcos que atracaron el pasado mes estaban fondeados desde hacía bastante tiempo a la espera de pago de la deuda que mantenía el gobierno con las casas importadoras, tanto por flete de transporte como por cancelación de la mercancía transportada.

“Si tenemos un poco de comida en el país es porque el gobierno hizo muchas compras con la idea de distribuir esos alimentos antes de las elecciones del 6 de diciembre, pero los retrasos en el pago de la deuda impidió la salida de la mercancía del puerto”, dijo Jiménez, quien agregó que el bajo movimiento significa que no se están reponiendo los menguados inventarios de productos alimenticios.

El vocero también informó que los barcos que están llegando al fondeadero carabobeño son de mucho menor calado que los que llegaban el año pasado, lo que se traduce en una reducción de las cantidades de productos importados.

Sobre la infraestructura, el presidente del gremio de comerciantes dijo que la mayoría de los 37 muelles presentan fallas, especialmente de maquinarias de carga y descarga. De hecho, solo existe una grúa de gran tonelaje, lo que dificulta las labores de descarga de contenedores de peso mayor.

Toda esta situación ha traído consigo la paralización casi total de la actividad económica de la ciudad, lo que involucra a más de 450 empresas aduaneras y relacionadas con el tráfico marítimo.

“Las empresas han tenido que despedir personal o llegar a acuerdos para la reducción de sueldo con la idea de no cerrar, porque si cerramos perdemos la licencia”, dijo Jiménez, quien destacó que las posibilidades de que la situación mejore en el corto plazo son prácticamente nulas.