La “corrección política” o la hipocresía del siglo XXI
Carolina Jaimes Branger vuelve al caso de Will Smith para proponer otra lectura de lo políticamente correcto y preguntarse: ¿y si alguien le da su "tate quieto" a Putin?
Carolina Jaimes Branger vuelve al caso de Will Smith para proponer otra lectura de lo políticamente correcto y preguntarse: ¿y si alguien le da su "tate quieto" a Putin?