El jefe de la bancada oficialista, Héctor Rodríguez, consideró que el diálogo no puede incluir, por parte de la oposición, diversos tipos de agresiones. "Si proponen degollarnos, odiarnos, perseguirnos, lanzarnos pupú, no es la forma de hacer política".
Los riesgos a los que pueden someterse las personas que entren en contacto con las "bombas" de excremento son parecidos a los que se corren al ingresar al río Guaire. Las heridas abiertas en la piel aumentan las posibilidades de contraer una enfermedad si hay contacto con una "puputov".
En los distintos buscadores de Internet hay abundante material sobre el el uso de excrementos humanos como arma biológica primitiva. Por esa vía nos enteramos de que los escritas, un pueblo nómada euroasiático que vivió desde el siglo IX antes de Cristo, hasta el IV de nuestra era, fueron los precursores de esta práctica. En la Edad Media también se utilizó, y posteriormente la resistencia vietnamita contra los norteamericanos también se valió de ese recurso para tratar de doblegar a su enemigo.
Tarros de excremento, balines, gases lacrimógenos vencidos, pintura, carros abalanzados hacia manifestantes. La violencia en Venezuela no da tregua e incorpora novedosos métodos, en una jornada que terminó este miércoles con el asesinato de otro joven en las calles, el número 39, según las cifras de la Fiscalía, en 40 jornadas de violencia política.
En horas de la tarde de este miércoles, un equipo de prensa de Globovisión fue agredido durante la cobertura de la manifestación por un grupo de personas que se encontraban en la protesta que, a esta hora, se lleva a cabo en la Plaza Francia de Altamira, en el este de Caracas.
Utilizar excremento en las manifestaciones para “neutralizar a los efectivos de orden público” es considerado como un arma bioquímica, cuyo uso es penado por la ley, según afirmó Marielys Valdéz, inspectora General de Tribunales, en una entrevista en el canal del Estado VTV reseñada por otros medios oficialistas.
La oposición venezolana intentará marchar este miércoles hacia el máximo tribunal de justicia, en el centro de Caracas, cuyos fallos contra el Parlamento desataron hace 40 días protestas contra el presidente Nicolás Maduro que dejan 37 muertos y cientos de detenidos.