La drástica transformación de la princesa Kalina de Bulgaria impacta al mundo

La princesa Kalina de Bulgaria es ahora otra mujer. Ni su cuerpo, ni su rostro son los mismos de hace unos años. La radical transformación ha sorprendido a los usuarios de redes sociales de todo el mundo, al comparar las fotos de «antes y después».

Kalina tiene 52 años y es hija del rey Simeón II de Bulgaria y de la española Margarita Gómez Acebo. Es una princesa sin trono, porque Bulgaria abolió la monarquía en 1946, así que su familia ha vivido la mayor parte del tiempo en España.

La transformación drástica de la princesa se nota en la cara y el cuerpo. Actualmente, tiene silueta de fisicoculturista, con músculos muy marcados. Esto se debe a que, según confesó la misma Kalina, se dedica «al entrenamiento con cargas de pesas y a la salud del cuerpo, soy deportista (hace equitación)», según confió en una entrevista al periódico español El Mundo. Su rostro también es otro. Reconocida por su belleza cuando era joven, las antiguas finas facciones han dado paso a un semblante tosco, de escasa expresividad.

Su esposo, el español Antonio «Kitín» Muñoz, ha explicado la alteración del rostro alegando mala praxis médica. Según él, en 1999, un dentista le perforó el hueso, lo que causó una infección que llegó hasta la nariz y el ojo, lo que ameritó cirugía estética. Pero eso fue hace 25 años y la cara le ha seguido cambiando.

¿Y por qué es ahora que la transformación de Kalina de Bulgaria se ha vuelto viral, si ya lleva unos años? Porque la princesa apareció a principios de junio durante un acto público, el de repatriación de los restos de Fernando I Bulgaria, primer zar de ese país.