«Tenemos un monitoreo permanente sobre las fronteras», aseguró el ministro de Defensa, Guillermo Botero, al intervenir en el Congreso Nacional de la Confederación de Cámaras de Comercio (Confecámaras) que fue instalado en Cartagena de Indias por el presidente de Colombia, Iván Duque, la noche del jueves.
Agregó que el país tiene «unas fuerzas (militares) que tienen la capacidad de responder en cualquier caso».
El jefe de la cartera de Defensa recalcó que Colombia no es un país provocador pero que es consciente de que «la situación de Venezuela es sumamente compleja».
Añadió que frente a «ese desorden y a esa crisis que están viviendo muchos Gobiernos buscan agredir a sus vecinos como una manera de resolver su problema interno y volverlo un problema externo».
Botero insistió en que motivar el patriotismo es una estrategia que Colombia ya conoce y que por tanto «no nos vamos a dejar provocar nunca» pero recalcó que «la soberanía nacional está garantizada».
El canciller colombiano, Carlos Holmes Trujillo, se desplazó el pasado 1 de septiembre al remoto caserío fronterizo de Vetas del Oriente donde incursionaron el 21 de agosto dos helicópteros y unos 30 militares venezolanos.
En esa oportunidad, Trujillo izó allí la bandera de Colombia.
En el mismo sitio los vecinos denunciaron en noviembre del año pasado que militares y miembros de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, Policía militarizada) de Venezuela ingresaron a territorio colombiano y los señalaron de quemar algunas de sus pertenencias.
Sin embargo, Venezuela negó la incursión denunciada por Colombia y aseguró que no se había producido ningún «acto violatorio de la soberanía nacional» del país vecino, lo que el canciller Trujillo consideró que estaba demostrado.