En un comunicado, la embajada «desmiente públicamente» las declaraciones sobre esta presunta transferida fallida, «que responden a una campaña mediática sin precedentes en contra de los legítimos gobernantes del país».
El presunto intento de transferencia fue avanzado por el diputado opositor Carlos Paparoni, quien afirmó este martes que el gobierno de Maduro intentó transferir -por medio de su embajada en Lisboa- cerca de 1.200 millones de dólares desde el Novo Banco hacia las oficinas en Uruguay de los bancos República y Bandes.
«Dicha transacción se pudo detener, hasta ahora, protegiendo así los recursos de todos los venezolanos, evitando que se los roben», agregó el diputado, quien precisó que dicha operación fue bloqueada por el Banco Central de Uruguay.
La Embajada de Venezuela en Portugal tachó de «irresponsable y falaz» esta acusación y dijo considerar «alarmante utilizar este tipo de artimañas que buscan manipular la opinión pública».
Además, consideró que la declaración de Paparoni busca «hacer ver que el gobierno legítimo del presidente Nicolás Maduro está actuando de manera fraudulenta sobre los fondos financieros del Estado».
La posibilidad de que los activos venezolanos en el Novo Banco fueran transferidos fue denunciada el lunes por el presidente del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, quien hace dos semanas se juramentó como presidente encargado del país.
Guaidó advirtió que tomaría las «acciones pertinentes» para evitar la transferencia.
El Parlamento del país caribeño pidió el 15 de enero a 46 países que no permitan al gobierno de Maduro disponer de los recursos de Venezuela en esos territorios, con el fin de «garantizar la protección» de los fondos en vista de «no contar» el país «con representación legal ante los entes regulatorios».
La misma petición se hizo a la banca privada de estos países, una lista en la que, además de los 28 de la Unión Europea, destacan Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú, Estados Unidos, Bulgaria, Rusia, China, Turquía y Emiratos Árabes.
El antichavismo asegura que Maduro, que juró hace menos de un mes ante el Supremo un nuevo mandato de 6 años, «usurpa» la Presidencia y que, por tanto, las competencias del Ejecutivo recaen en el jefe del Parlamento hasta que sean convocadas elecciones.