«Es política del gobierno de Estados Unidos de tratar al establecimiento o expansión de la presencia militar en Venezuela, de parte de cualquier nación foránea al hemisferio occidental como una amenaza directa a la paz y seguridad internacional», tuiteó Rubio tras conocerse la llegada de más de 100 soldados rusos a Venezuela.
El político por el partido republicano se hizo eco de la condena que el gobierno de Donald Trump hace sobre la injerencia de Vladimir Putin y el Kremlin en los asuntos internos de Venezuela.
En un comunicado a la prensa la oficina de la Casa Blanca condena el uso continuado de personal y equipo militar ruso en un intento de mantener a Nicolás Maduro en el poder. «Maduro utiliza este apoyo militar para reprimir aún más a los venezolanos; perpetuar la crisis económica que ha destruido la economía del país; y pone en peligro la estabilidad regional».
Estados Unidos reiteró el llamado al ejército venezolano de cumplir con su deber constitucional de defender a la población y apegarse estrictamente a lo que establece la Carta Magna venezolana.
Por otra parte Estados Unidos advirtió que cualquier despliegue de agente foráneo al hemisferio en Venezuela o en otro país será visto como una provocación y una alteración de la paz y la seguridad internacional. «Seguiremos defendiendo a Estados Unidos y sus intereses y mantendremos el apoyo a nuestros socios que también están comprometidos y comparten con nosotros el respeto por la libertad, la seguridad y el imperio de la ley».