El presidente estadounidense, Joe Biden, y varios de sus aliados europeos, incluyendo Francia y Alemania, pidieron este lunes a Rusia que reduzca la tensión en la frontera con Ucrania ante una posible agresión o invasión por parte del Kremlin.
Así lo informó la Casa Blanca en un comunicado, en el que explicó que Biden compartió su preocupación sobre el conflicto entre Rusia y Ucrania en una llamada con varios líderes europeos: el presidente de Francia, Emmanuel Macron; la canciller de Alemania, Angela Merkel; el primer ministro de Italia, Mario Draghi; y el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson.
«Los líderes discutieron su preocupación compartida sobre la concentración militar rusa en las fronteras de Ucrania y la retórica cada vez más dura de Rusia», destacó la oficina presidencial estadounidense.
Esta llamada entre Biden, Macron, Merkel, Draghi y Johnson se produjo un día antes de que el mandatario estadounidense converse con su homólogo ruso, Vladímir Putin, sobre las crecientes tensiones en la frontera entre Rusia y Ucrania.
La conversación entre Biden y Putin, la primera entre ambos líderes desde el encuentro que sostuvieron en verano en Ginebra (Suiza), llega en un momento en el que los servicios de inteligencia estadounidenses consideran que Rusia podría intentar invadir Ucrania a comienzos de 2022.
De hecho, la Inteligencia de Estados Unidos calcula que Moscú tiene desplegados cerca de 70.000 soldados, junto con equipamiento y artillería, en la frontera con Ucrania, y sospecha que puede estar preparando un ataque que llegaría a principios de 2022, de acuerdo con fuentes oficiales citadas por medios estadounidenses.
En ese comunicado, la Casa Blanca dijo que Biden y sus aliados europeos acordaron que la diplomacia, especialmente a través del Formato de Normandía, «es la única forma de avanzar para resolver el conflicto» en el Donbás (Ucrania) a través de la implementación de los Acuerdos de Minsk.
Asimismo, los líderes subrayaron su apoyo a la soberanía e integridad territorial de Ucrania y pactaron que sus respectivos equipos se mantendrán «en estrecho contacto» para monitorear la situación.
También el Gobierno de Estados Unidos reiteró este lunes su apoyo «inquebrantable» a la soberanía, independencia e integridad territorial de Ucrania en una llamada entre el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
En otro comunicado, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, señaló que Blinken y Zelenski coincidieron en la necesidad de una resolución pacífica y diplomática del conflicto en el Donbás y el restablecimiento total de la soberanía de Ucrania sobre sus fronteras reconocidas internacionalmente, incluyendo Crimea.
Ucrania aspira a integrarse en la OTAN como mejor mecanismo de defensa ante la amenaza del Kremlin, que se anexionó en 2014 la península de Crimea y apoya abiertamente a las repúblicas separatistas prorrusas de Donetsk y Lugansk.