París acogió este jueves el tradicional desfile militar por la fiesta nacional de Francia del 14 de julio, en un contexto marcado por la guerra en Ucrania, que según el presidente francés Emmanuel Macron va a «durar» y obligará al país a vivir sin el gas ruso.
«Tenemos que prepararnos todos a que esta guerra dure. El verano y el principio del otoño (boreales) serán sin duda muy duros», declaró el jefe de Estado francés en una entrevista a las cadenas France 2 y TF1, poco después de haber asistido al desfile militar en los Campos Elíseos.
En momentos en que la guerra en Ucrania afecta al crecimiento y empuja al alza a los precios de la energía y los alimentos, «tenemos que prepararnos a prescindir del gas ruso», advirtió Macron, añadiendo que el Estado iba a preparar un «plan de austeridad» energética.
El mandatario hizo estas declaraciones en un contexto político interno complejo, después del revés de su coalición en las legislativas de junio que lo dejaron sin mayoría absoluta.
En total, unas 6.300 personas -casi 5.000 de ellas a pie- desfilaron en la célebre avenida parisina bajo un sol radiante y ante un público numeroso que soportó las altas temperaturas. El espectáculo movilizó 64 aviones, un dron, 25 helicópteros, 200 caballos y 181 vehículos motorizados.
Iniciado con los aviones de la Patrulla de Francia que tiñeron el cielo de los colores de la bandera gala, el desfile incluyó insignias de nueve países invitados, muchos vecinos de Rusia o de Ucrania: Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, República Checa, Eslovaquia, Hungría, Rumania y Bulgaria.
También marcharon tropas francesas desplegadas recientemente en el flanco oriental de Europa.
Desde el inicio de la guerra en Ucrania, Francia reforzó sus misiones en esa zona. Unos 500 soldados franceses fueron destinados de urgencia a finales de febrero en Rumania, en el marco de la OTAN.
Francia también participa en misiones de refuerzo terrestre y aéreo en Estonia, y sus aviones de combate Rafale contribuyen a proteger el cielo polaco.
Teniendo en cuenta el contexto de la guerra en Ucrania, pero también de la inflación, el presidente francés anunció el miércoles por la noche una nueva ley de programación militar (LPM) 2024-2030 para «ajustar los medios a las amenazas».
Francia invierte más en ciberinvestigadores
El mandatario inició en 2017 un claro aumento de las finanzas de defensa tras años de contención. El presupuesto militar aumentará en 2022, y en 2023 se incrementará de 3.000 millones, para situarse en 44.000 millones de euros (igual cifra en dólares).
Pero el conflicto en Ucrania ha revelado las carencias en la maquinaria de defensa de Francia, por ejemplo en materia de municiones.
Unos 125.000 miembros de las fuerzas de seguridad fueron movilizados en todo el país para la fiesta nacional. Los «chalecos amarillos» anunciaron su intención de manifestarse el jueves por la tarde en la capital.
Por la noche, los fuegos artificiales clausurarán la fiesta en muchas partes del país, que atraviesa una ola de calor extremo. Una parte del territorio se encuentra en alerta por los incendios.
La celebración se extiende en varias naciones del mundo este 14 de julio.
Entre los que desfilaron por los Campos Elíseos figuraron 14 unidades de tropas de la Marina, que celebran sus 400 años de existencia, y por primera vez los ciberinvestigadores de la gendarmería.
En esta edición también se exhibieron los nuevos equipamientos del ejército francés, como el vehículo blindado de reconocimiento Jaguar, junto al blindado de nueva generación Griffon.
El desfile aéreo, en el que participaron varios aparatos europeos, contó por primera vez con el dron Reaper, utilizado en el Sahel para localizar y matar a yihadistas.