Máquinas

Innovación en el sector automotor ocupa a Silicon Valley

Tesla, Ford, Toyota y Hyundai, son solo algunas marcas automotrices que se han instalado en la cuna de la tecnología mundial en California

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Silicon Valley

“The Valley of Heart’s Delight” o el «Valle del deleite de los corazones», así era conocida la zona sur de la Bahía de San Francisco, California, por la cantidad importante de árboles frutales. Hoy es más conocida por el negocio floreciente de la tecnología y el nombre ha cambiado por el “Valle del Silicio” o “Silicon Valley”.

Allí están radicados los centros tecnológicos de las compañías más importantes del mundo. Genios de la ingeniería y el diseño confluyen apuntando a la innovación. Empresas como Google y Apple tienen sus centros de operaciones y las principales compañías de otros ramos, como el sector automotor, han visto una oportunidad de establecerse ahí para el desarrollo de nueva tecnología para su negocio.

Tesla es quizás la empresa automotriz más visible de Silicon Valley, aunque desde hace años está mudando sus operaciones de producción a Texas, fundamentalmente por un tema de impuestos y de costo de la vida para los empleados.

Por su parte, en 2016 se creó Ford Greenfield Labs en Palo Alto, California. Ford se ha involucrado con 2.000 nuevas empresas para comprender sus ideas y visiones y tratar de incorporarlas a la producción, ayudando a la compañía automotriz a generar innovación en las industrias del transporte y la tecnología.

Este 2022 Ford dio a conocer algunos de los proyectos que maneja con estas startups tecnológicas:

Symbio Robotics: una empresa de robótica que utiliza inteligencia artificial y aprendizaje automático, Symbio ha estado trabajando con Ford en una plataforma de software que permite que los robots industriales se adapten a entornos inciertos. Usando inteligencia artificial, retroalimentación de fuerza y ​​visión por computadora, Symbio permite que los robots realicen tareas de ensamblaje complejas y mejoren la eficiencia de fabricación. Después de desarrollar una prueba de concepto con Symbio y completar con éxito los pilotos con el Centro de Fabricación Avanzada de Ford, esta tecnología se implementó en el Centro de Tren Motriz Eléctrico de Livonia de Ford. Recientemente Toyota anunció que también está aprovechando el software de Symbio Robotics para acelerar la producción en sus líneas de ensamblaje, a la vez que mejora la calidad y la eficiencia del proceso.

Espuma Cruz: La quitina es un material que se encuentra en las conchas, escamas, piel y huesos de crustáceos, insectos e incluso hongos. Es el segundo biopolímero más abundante del planeta. Cruz Foam toma ese material y lo convierte en una espuma estructural sostenible que se puede usar para una variedad de aplicaciones, incluidos interiores de vehículos, insonorización y embalaje para envío de piezas, y no representa un impacto negativo en el medio ambiente como lo hacen los plásticos tradicionales. Ford está trabajando con Cruz Foam en una prueba de concepto para explorar cómo podría usarse este material en la industria automotriz.

Cepton: un proveedor inteligente de soluciones de detección 3D, Cepton desarrolla sensores “Lidar” para los mercados de infraestructura inteligente y automotriz utilizando un enfoque de imagen único llamado “MMT” que permite escanear entornos sin espejos, o componentes giratorios o de fricción, creando una solución de bajo costo y un dispositivo de percepción de alta resolución.

Hyundai también está en el valle de San Francisco. Con el nombre Hyundai Cradle, el fabricante de automóviles surcoreano abrió su primera cuna en Silicon Valley en 2017, luego de poner en funcionamiento cuatro centros de innovación en Seúl, Tel Aviv, Berlín y Beijing para apoyar a las nuevas empresas y “descubrir la tecnología de movilidad del futuro”.

Mientras Toyota, a mediados de 2021 cambió el nombre de su ala de inversión en investigación tecnológica y lo que antes se conocía como Toyota AI Ventures ahora es simplemente Toyota Ventures, que tiene un total de 500 millones de dólares en activos bajo su administración.

Los 300 millones de dólares en capital nuevo los dividieron entre dos nuevos fondos: el Toyota Ventures Frontier Fund y el Toyota Ventures Climate Fund.

Frontier Fund continúa invirtiendo en las áreas en las que Toyota Ventures ya estaba involucrado: inteligencia artificial, autonomía, computación en la nube, datos, movilidad y robótica. Pero también invertirá en startups que trabajen en tecnologías de ciudades inteligentes, salud digital, tecnologías financieras, materiales y energía. El Fondo Climático se centrará en encontrar y financiar nuevas empresas tecnológicas en etapa inicial que estén trabajando en formas de promover la neutralidad de carbono.

Como se observa, el negocio tecnológico en la industria automotriz florece tanto como los árboles frutales en este valle californiano.

Con información de Calautotdc, Bizjournals, Hyundai y Ford

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