Los medicamentos que rescataron del sida a Abel* a mediados de 2016 tienen cuatro meses desaparecidos de los hospitales venezolanos. Estuvo a punto de morir a causa de una infección estomacal que complicó el virus de inmunodeficiencia humana que le fue diagnosticado en 2009 y se salvó gracias a los antirretrovirales. La posibilidad de una recaída ahora lo persigue disfrazada de escasez.
En el Día mundial de la lucha contra el Sida, la crisis humanitaria amenaza con hacer que el hombre de 47 años pierda esa batalla.
“Le dieron 15 días de vida. Le pusieron un tratamiento con antirretrovirales y gracias a Dios funcionó. Pero ahora tenemos cuatro meses que no consigue atazanavir, truvada ni ritonavir. Yo tomo Viraday y tengo para este mes, pero ya no viene más, entonces no solo es el temor por la complicación de que me embarco en el mismo bote de él”, dice Mariana*, su esposa.
La pareja tiene dos hijos, uno de 6 años y otro de 12 años, a quienes temen dejar solos si se consuma el riesgo que significa vivir con VIH sin tener los medicamentos.
“He perdido mucho peso porque estoy muy preocupada. Esta vez estoy yo en decadencia. Me ha pegado mucho. Es difícil no angustiarse. El mes pasado nos hicimos el examen de carga viral y sus niveles están alterados por falta de medicamentos”, cuenta Mariana.
En el Hospital Luis Ortega de Porlamar donde ambos retiran los antirretrovirales que debe garantizar el Estado no les dan explicaciones. Simplemente no hay.
La explicación a la escasez la ha repetido la organización Stop VIH en cada denuncia: el gobierno de Nicolás Maduro no hizo las compras de los 27 tipos de fármacos que se necesitaban en 2017. Si la importación se firma antes de que termine el año, con suerte podría materializarse durante el primer trimestre de 2018. Más meses de espera.
Al menos 53.900 de los 77.000 infectados con VIH registrados en el Programa Nacional de Sida han sufrido este año el desabastecimiento. Acción Solidaria recopiló 200 testimonios de pacientes afectados en Caracas, Carabobo y Aragua y pondrán la denuncia ante la Fiscalía y la Defensoría del Pueblo.
82 organizaciones difundieron un comunicado en el que recuerdan las cifras rojas asociadas a esta condición de salud en Venezuela: las muertes por Sida en el país aumentaron 75% desde 2011; de los 27 tipos de medicamentos prescritos, solo 5 están disponibles en los depósitos del Ministerio de Salud; más de 800 personas tienen más de seis meses sin tomar el antirretroviral Complera; y las farmacias públicas tienen más de dos años que no entregan fórmulas lácteas a los niños con VIH en situación de pobreza.
Por ello, exigen al Estado que garantice las vidas y la salud de las personas con VIH y que autorice la apertura del canal humanitario para facilitar la cooperación internacional.
*Los nombres fueron modificados a petición de la fuente.
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