Entre el material se encuentran inyectadoras de todas las medidas, guantes, gasas, tubos recolectores de sangre, hojas de bisturí, ampollas de medicamentos como diclofenac y lidocaína, así como cables conectores de monitores, bombillos y apagadores de luz que fueron escondidos en el techo raso de algunas áreas del nosocomio, informó el director del centro de salud, Luis García.
Refirió que el personal adscrito al departamento de Seguridad detectó la irregularidad tras diferentes operativos de revisión en áreas de descanso, casilleros e incluso en pasillos de bajo tránsito del hospital.
Por este hecho fueron capturados siete trabajadores del nosocomio que se desempeñaban como médicos especialistas, vigilantes y camilleros.
García explicó que una vez finiquitados los procedimientos judiciales, el material confiscado será enviado a las áreas de Almacén, Farmacia y Servicios Generales para su redistribución y uso correcto.