Suicidios en aumento: Trujillo entre los cinco estados con más casos
Trujillo es uno de los cinco estados con mayor tasa de suicidios en la actualidad. Un trabajo de Cotejo.info expone la magnitud de la situación
Trujillo es uno de los cinco estados con mayor tasa de suicidios en la actualidad. Un trabajo de Cotejo.info expone la magnitud de la situación

Trujillo, una región andina conocida por su actividad agrícola y su paisaje montañoso, también aparece en un lugar que nadie desearía: entre los estados con mayor tasa de suicidios en Venezuela. Según el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), en 2024 la entidad registró una tasa de 8,7 suicidios por cada 100.000 habitantes, situándose entre los cinco estados con mayor incidencia, frente a una tasa nacional estimada ese mismo año en 6,9.
La evolución reciente muestra oscilaciones alarmantes: Trujillo pasó de 4,0 en 2022 a 11,9 en 2023, para moderarse luego a 8,7 en 2024, lo que refleja picos abruptos en cortos períodos. A la luz de la serie histórica, la tasa promedio de Trujillo entre 1950 y 2014 fue de 6,3, y sólo Mérida lo superaba en ese período; la tendencia nacional también ha sido variable, con picos de 9,3 registrados por el OVV en 2018.
Esas cifras, sin embargo, deben leerse junto a un panorama de opacidad y barreras: el Estado no publica estadísticas completas desde 2016 (última tasa oficial conocida de Trujillo 5,5), existen Muertes de Intención No Determinada (MIND) y un subregistro probable.
Al mismo tiempo, el acceso a atención en salud mental es limitado —sobre todo en zonas rurales— y enfrenta obstáculos económicos (las consultas privadas pueden costar entre 20 y 60 dólares) y culturales: el estigma, la privacidad familiar y la escasez de profesionales agravan la dificultad de quienes buscan ayuda.
En Venezuela no existen registros oficiales recientes sobre suicidios. El gobierno dejó de publicar estas estadísticas en 2017, con datos correspondientes a 2016. Desde entonces, la única referencia disponible proviene de organizaciones independientes.
El Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) estimó que en 2024 se produjeron 1.962 suicidios en el país, lo que equivale a una tasa nacional de 6,9 por cada 100.000 habitantes, una cifra todavía elevada para el contexto venezolano.
En Trujillo, el panorama es aún más preocupante. Según el informe de violencia autoinfligida del OVV de 2024, la entidad registró una tasa de 8,7 suicidios por cada 100.000 habitantes, lo que la ubicó entre los cinco estados con mayor incidencia del país. Aunque esto representa una disminución frente a 2023 —año en el que alcanzó 11,9, la cuarta tasa más alta a nivel nacional— el descenso contrasta con el salto abrupto del año previo, ya que en 2022 había sido de apenas 4,0.
Además, el promedio actual supera la última cifra oficial publicada para el estado (5,5 en 2016) y también su propio promedio histórico entre 1950 y 2014 (6,3). A esto se suma un subregistro probable debido a la opacidad estatal, las muertes clasificadas como “intención no determinada” y el manejo privado de estos casos dentro de las familias, lo que sugiere que la cifra real podría ser aún mayor.
Antes del colapso económico y social del país, las cifras de suicidio eran considerablemente más, bajas según la OVV, pasando de 3,8 en 2015 a 8,3 en 2017. A partir de la emergencia humanitaria compleja, las tasas comenzaron a aumentar y, en estados como Trujillo, el fenómeno se intensificó.
Para especialistas, este quiebre coincide con el deterioro de las condiciones de vida, la reducción de servicios, la migración masiva de familiares —especialmente jóvenes— y la debilitación de las redes de apoyo emocional, factores que crean un terreno fértil para la desesperanza y la vulnerabilidad emocional.
“Es posible que la personalidad del trujillano, que lo hace muy introvertido y cerrado, de guardarse sus problemas y no drenarlos, sobre todo los hombres, pudiese ser uno de los factores de riesgo principales”, explicó una fuente del Observatorio Venezolano de Violencia especializada en el tema. Sin embargo, advirtió que no existe un estudio científico específico sobre el suicidio en Trujillo y que “detrás de cada caso intervienen múltiples factores”.
Consultado por el equipo de Cotejo.info, el Padre Danny Socorro, director de la Escuela de Psicología de la UCAB y de PsicoData, coincide en que el suicidio no puede explicarse desde una sola causa: “es un fenómeno multidimensional en donde se configuran muchos elementos al mismo tiempo”. Entre los que identifica como más relevantes se encuentran:
Jesús González, psicólogo en ejercicio en Trujillo, coincide en que existe un componente cultural que influye en la forma en que las personas enfrentan el sufrimiento emocional. “En Trujillo, expresar el sufrimiento o pedir ayuda puede ser interpretado muchas veces como debilidad y cobardía”, señaló.
A esto se suman otros detonantes propios de la región andina: precariedad económica, desempleo, migración familiar y un fácil acceso a medios letales en zonas rurales.
Los tres estados andinos —Trujillo, Mérida y Táchira— históricamente concentran las tasas más altas de suicidio en Venezuela. Durante 23 años consecutivos, Mérida lideró el ranking nacional, hasta que en 2024 fue superada por Táchira, con 12,3 suicidios por cada 100 mil habitantes, según el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV). Trujillo se ubicó este año en el quinto lugar. No es una coincidencia: los especialistas señalan patrones socioculturales y ambientales que se repiten en la región.
El OVV identifica factores comunes, sobre todo en las zonas rurales: exposición a agroquímicos (relacionados en estudios internacionales con depresión y conductas suicidas), consumo de alcohol, machismo, violencia intrafamiliar y dinámicas familiares marcadas por antecedentes de suicidio o incluso endogamia. Estos elementos crean un entorno de alta vulnerabilidad emocional.
Para el padre Danny Socorro, quien ha trabajado en misiones y Psico Campamentos en los Andes, el núcleo de los casos está en la familia: “Lo que debería ser un sostén a veces es el epicentro del problema. Violencia, abuso, incesto, silencio… cuando todo eso se articula, explota”, afirma.
Las cifras de PsicoData UCAB (2024) confirman la gravedad del contexto emocional en la región. Los Andes lideran el país en dos indicadores de riesgo asociados al suicidio:
“La desesperanza en Los Andes es altísima. Cuando la gente siente que no hay salida, el suicidio aparece como una única opción para aliviar el sufrimiento”, explica Socorro.
Para continuar leyendo sobre el problema de suicidios en Trujillo, la respuesta del Estado y las redes de apoyo, haga click aquí para leer el texto completo en Cotejo.info.