Máquinas

El Mustang de la NASA

Con un motor de 627 caballos y cargado de detalles propio de la NASA, este modelo súper especial rinde homenaje a la misión espacial que logró llevar al primer hombre a la Luna

Texto: Jesús Hurtado
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Por: Jesús Hurtado

Más de cincuenta años han pasado desde que el Ford Mustang hizo su debut y aún sigue despertando pasiones, una sensación que innegablemente consigue el ultra especial y único Mustang Apollo Edition con el cual la firma del óvalo azul rinde homenaje a la misión espacial que logró colocar al primer hombre en la Luna.

Creada con fines benéficos para apoyar el programa de formación de pilotos de aviación de Estados Unidos, esta pieza de colección vendida por más de 230 mil dólares toma no pocos elemento de los vehículos espaciales, comenzando por la pintura laqueada en blanco negro, algo que solo se puede observar en modelos de altísima gama como los Bugatti o Rolls Royce.

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Basado en la versión GT de insigne pony car, el Mustang Apollo Edición resalta por una configuración externa mucho más agresiva que se evidencia en el prominente faldón delantero retráctil fabricado en fibra de carbono, material que también sirve de sustento para los voladizos laterales, el spoiler trasero y el amplio difusor, elementos que hablan de un carro de prestaciones superiores.

Para enfatizar su carácter extraplanetario, cuenta con un peculiar juego de luces LED en los bajos al encenderse producen una sensación de levitación o nave en maniobras de reingreso a la atmósfera terrestre, algo no visto en otros modelos acondicionados con este tipo de iluminación.

El look externo está complementado con rines especiales multirradiales de 21 pulgadas de doble tono, cuyos radios se dejan entrever las dobles pinzas de los frenos Brembo de seis pintones, otro detalle que habla de la gran potencia del Mustang Apollo.

Propulsión de altura
Originalmente provisto de un motor atmosférico reformulado V8 y 5.0 litros de capacidad, los técnicos de Ford Performance, la división de vehículos de altas prestaciones de la firma americana, realizaron algunos cambios en la configuración de la admisión y del escape para mejorar el rendimiento.

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Incorporando un turbo especial, el resultado es que de los 420 caballos de potencia entregados por el propulsor original, el Apollo cuenta con 627 hp, un sustancial incremento que merite alcanzar velocidades superiores a los 333 km/h y pasar de 0 a 100 km/h en menos de 4,5 segundos.

Adosada a este bravío motor está una caja de transmisión de manual de seis velocidades que al igual que la edición GT, pueden ser maniobradas desde levas colocadas detrás del volante.
Para mejora la sensación de deportividad, la ya actualizada suspensión trasera independiente en paralelogramo deformable fue reforzada para ofrecer mayor maniobrabilidad en curvas, algo que agradecerá el usuario de este súper bólido americano tomando en cuenta el freno que la rigidez del chasis imprime a la hora de girar.

El interior también muestra un look más espacial. El panel de control cuenta con nuevos relojes de nuevo cuño que simulan los de un avión, a los que se agregan mandos digitales y avanzado sistema de navegación con pantalla táctil a color de ocho pulgadas.

Los asientos, que en esta versión tienen una disposición más deportiva, están forrados en piel negra con una franja blanca latera y costuras en rojo. Los respaldos cuentan además con el logotipo de la misión Apollo y de los programas más importantes de la NASA.

Recubierto en gran parte en piel, en puertas, consola y panel frontal se repite la combinación de fondo negro con franja en blanco, además de emblemas que recuerdan los programas espaciales diseminados por varios lugares.

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