Más de mil armas de fuego han sido entregadas de forma voluntaria en Venezuela a través de un plan gubernamental de desarme que se inició hace más de dos meses a través del cual se pueden canjear pistolas por lavadoras, cocinas o becas de estudio, informó el Gobierno venezolano.
El 17 de agosto de 2014, un reportaje de El Nacional, expuso los cálculos de la Comisión Presidencial para el Desarme; estos indican que en Venezuela hay más de 1,5 millones de armas. No obstante, el director del Observatorio Venezolano de Violencia, el sociólogo Roberto Briceño León, afirmó algo distinto en una entrevista para Panorama:
Los cálculos que hacemos lo hacemos partiendo de nuestros estudios de victimización. Ésto nos permite deducir que hay entre cinco millones y seis millones de armas.
En un reportaje para Código Venezuela, el periodista Arnaldo Espinoja cita al presidente de la Comisión de Seguridad y Defensa de la Asamblea Nacional (AN), el diputado Juan José Mendoza, dijo que en el país circulaban «entre 9 y 15 millones de armas ilegales». Sin embargo, Amnistía Internacional calcula que existen «6 millones de armas en Venezuela, de las cuales 75% no están oficialmente registradas».
En todo el país han sido «entregadas voluntariamente más de 1.098 armas hasta el momento» y se han incautado más de 13.000, dijo a los periodistas la ministra de Interior venezolana, Carmen Meléndez, durante un acto de entrega de lavadoras y aires acondicionados como incentivo a 21 de los voluntarios que acudieron a los centros de canje.
«Le hacemos un llamado a todos los venezolanos que tengan armas, que las quieran entregar voluntariamente (…) y que quieran recibir incentivos como lo estamos haciendo hoy», dijo Meléndez que además explicó que los artículos entregados fueron donados por un fabricante de estos productos e invitó a otros empresarios a sumarse:
«No se les va a preguntar nada, solo entregan el arma y posteriormente les entregaremos el incentivo».
Venezuela inició el pasado 29 de septiembre unas jornadas voluntarias de entrega de armas de fuego, que se canjean por herramientas de trabajo, electrodomésticos o becas de estudio, como una estrategia para intentar desarmar a la población y disminuir las cifras de violencia en el país.
Como parte del Plan Nacional de Desarme, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aprobó 300 millones de bolívares -47,6 millones de dólares- para crear un fondo nacional de desarme a fin de incentivar la entrega de armas.
Desde entonces se han instalado 72 puntos en distintas ciudades del país que permiten la entrega de las armas de manera voluntaria y confidencial.
El Gobierno ha impulsado varios programas para luchar contra la violencia en Venezuela, que incluyen la reestructuración de cuerpos policiales, operativos de patrulla especial y el desarme de la población.
Según cifras oficiales, la violencia en Venezuela se cobró la vida de más de 11.000 personas el año pasado, número inferior a los 16.000 de 2012, aunque la organización no gubernamental Observatorio Venezolano de Violencia asegura que los asesinatos fueron cerca de 25.000 a lo largo de 2013.
*Este texto fue elaborado a partir de información de la agencia de noticias Efe.