Insulza reitera "urgencia" de crear espacios de diálogo nacional en Venezuela

El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, se reunió en Washington con Lilian Tintori, esposa del dirigente político Leopoldo López, y expresó su rechazo a la autorización dada en Venezuela para que las Fuerzas Armadas puedan participar en el control de las manifestaciones.

Durante su reunión, Insulza también reiteró «la urgencia de crear condiciones que abran espacios al diálogo nacional, lo que estimó responsabilidad tanto del Gobierno como de las fuerzas opositoras» en Venezuela, de acuerdo con la OEA.

Insulza recibió a Tintori en su oficina en la sede de la Organización de los Estados Americanos (OEA), a donde ella acudió acompañada de familiares de otros detenidos en Venezuela, informó el organismo en un comunicado.

«Lilian Tintori pidió específicamente al secretario general Insulza que interceda para lograr la libertad de Leopoldo López, a quien, aseguró, solo lo guía el objetivo de lograr cambios dentro de los marcos constitucionales vigentes en su país», señaló la OEA.

Tintori, que ha visitado varios países exponiendo el caso de su esposo, entregó a Insulza «detalles de varios procesos abiertos contra dirigentes opositores» en Venezuela y denunció la falta de «debido proceso» en el caso de López, según el comunicado de la OEA.

Insulza «escuchó el relato de la esposa de López y ofreció poner los antecedentes en conocimiento de las instancias pertinentes de la Organización» que dirige, añadió la OEA.

Rechazo a resolución

Además, el titular de la OEA expresó su «fuerte rechazo» a la recientemente aprobada resolución 008610 del Ministerio para la Defensa, que transfiere a las Fuerzas Armadas la misión de controlar las manifestaciones masivas.

Ese tipo de medidas «solo polarizan la situación interna venezolana y no colaboran en la búsqueda de puntos de encuentro en la dividida sociedad del país», afirmó Insulza, según el comunicado.

La Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos también criticó la resolución adoptada en enero por el Gobierno venezolano, que indica que las Fuerzas Armadas podrán aplicar el «método del uso de la fuerza potencialmente mortal» durante manifestaciones, cuando la situación lo requiera.