Venezuela

Mujeres de armas tomar: las mamás de los malandros

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No existe vergüenza ni miedo. Aflora el orgullo, el resteo, la autoridad. Ellas se saben las mandamases del barrio porque sus hijos les dejaron su legado: el cartel. En algunos barrios, el amor de madre, el de los biberones y los pañales, crece hasta convertirse en complicidad

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