Familiares de reclusos de Politáchira se declaran en huelga de hambre

Apoyados por las notas del ¡Gloria al Bravo Pueblo¡ entonadas desde el interior del recinto carcelario, los familiares de los reclusos que desde hace tres días protestan dentro de los calabozos de Politáchira, iniciaron una huelga de hambre.

En vista de que no se ha concretado el traslado de los presos al penal de Tocorón ni el ingreso de alimentos porque las autoridades no lo permiten, cerca de 20 personas se apostaron frente a la sede policial con tapabocas en señal de protesta.

“Yo me disponía a entrar y en ese momento se empezaron a oír gritos, cerraron las puertas y también se oyó una detonación de arma de fuego, en adelante no supimos más nada”, dijo Jhoana sobre los hechos del pasado jueves 7 de septiembre.

Desde entonces un grupo de reclusos tomó como rehenes a dos agentes policiales y a 10 de sus familiares que realizaban la visita diaria y aun no se ha logrado un acuerdo entre reos y autoridades.

– Desmienten a la autoridad –

A pesar de los anuncios hechos por Ramón Cabeza, Secretario de Seguridad Ciudadana del estado Táchira, que aseguran que la situación está controlada y que se garantizarán todos los procesos de ley; familiares de los reos denunciaron que las autoridades han calificado a los rehenes civiles como colaboradores e implicados en la reyerta.

“Según las autoridades ahora nuestros familiares están implicados en el motín carcelario y eso es falso, hay que desmentirlo públicamente”, señaló una familiar de uno de los internos que prefirió no identificarse.

“Desde el interior del penal nos indican que hay un grupo de efectivos policiales ubicados en el techo de la sede de la policía, amedrentan a los muchachos. Hace un momento escuchamos una detonación pero desconocemos de dónde procede”, denunciaron los familiares de los presos.

Carteles con consignas que rezan: “Queremos paz, no queremos sangre. Policías no nos maltraten”, se divisan a lo lejos de la cárcel, lugar custodiado por policías que impiden el acercamiento a los medios.

– Hacinamiento y trato cruel –

El hacinamiento, retardo procesal, malos tratos, no garantizar la alimentación y los servicios básicos (agua y luz) son algunas de las razones esbozadas por los reclusos para mantenerse en protesta.

Los familiares aseguran que además de estas razones, existe violación de los derechos humanos, tratos denigrantes, maltratos y golpes.

“Cada vez que hay una requisa ingresan funcionarios de la Brigada de Orden Público (BOP), a mi hermano que tiene 10 meses recluido allí lo han dejado como Dios lo trajo al mundo, lo trasladan a otras celdas totalmente desnudo y he tenido que comprarle desde la colchoneta para dormir hasta los zapatos”, precisó Jhoana.

Desde hace unos tres meses, Raquel Sánchez, representante del Foro Penal en la entidad andina, ha denunciado violación de derechos humanos, casos de tortura, además de «una situación inhumana en cuanto a la comida».

“Hemos visto el deterioro físico de nuestros defendidos cuando los trasladan a las audiencias porque no les dan alimentos como debe ser. Les están dando solo una vez al día”, dijo la representante del Foro Penal.

Los brotes de sarna y otro tipo de enfermedades han sido constatados por los representantes del Foro Penal dentro de los calabozos de la Policía del Táchira y otros sitios carcelarios de prevención.

“A veces algunos nos han dicho que prefieren no comer porque los alimentos se las dan en mal estado y una sola vez al día. Yo estoy defendiendo a un muchacho que en 20 días de reclusión rebajó 20 kilos”, denunció la vocera del Foro Penal.

Golpizas, hematomas y abrasiones en varias partes del cuerpo también fueron denunciadas hace algún tiempo por la organización pro defensa de los derechos de los humanos en Táchira.

“Hasta el momento no sabemos si la Defensoría del Pueblo en Táchira, en conjunto con la Fiscalía del Sistema penitenciario, ha realizado alguna investigación sobre los casos de maltrato a los reos”, dijo Raquel Sánchez.

– Cronología –

El pasado jueves 7 de septiembre un grupo de reclusos tomó la sede policial pidiendo traslado al Centro Penitenciario de Aragua en Tocorón. Tomaron 10 familiares como rehenes y a dos policías. Exigen diálogo con las autoridades para que se consolide el traslado, situación que se manejó en un primer momento.

El viernes 8 de septiembre el director de la Policía del Táchira, Amador Torres, se reunió con los familiares de los reclusos en las afueras de la comandancia, en donde anunció sobre el traslado de 23 reos que tienen en la lista de boletas de traslado a Tocorón.

No era posible ampliar el número de traslados, pues para ello es necesaria la orden del juez de la causa porque ni siquiera para una consulta médica puede salir un reo sin la autorización del magistrado.

El acuerdo al que se llegó fue el siguiente: trasladar a los 23 reclusos de la comandancia de Politáchira a Tocorón, luego de ello los presos liberarían a los rehenes y finalmente se permitiría el ingreso de las autoridades para hacer la requisa.

Se acordó que solo los cuerpos policiales ingresarían a la respectiva requisa, acompañados del Defensor del Pueblo, a fin de garantizar la integridad de los presos. Sin embargo, esto no se cumplió.

El sábado 9 se instaló en la Comandancia Policial una mesa de diálogo con representantes del Ministerio de Asuntos Penitenciarios, la Guardia Nacional Bolivariana y familiares de los reclusos.

En la reunión, que se extendió hasta las 4:00 pm, se fijaron algunos puntos aunque ninguno incluyó, según los familiares de los reos, resguardar la integridad física, el derecho a la vida y la alimentación digna de los presos.

“No se firmó la propuesta porque no estuvimos de acuerdo. Pedimos se redacte un nuevo comunicado en donde quede expreso el respeto a la vida y a la integridad física de cada uno de los reclusos. Además, de restablecer el servicio de agua y luz que lleva más de tres días suspendido”, solicitó Yonai Maldonado.