Edificios de Misión Vivienda en Petare se hunden como el Titanic

Atendiendo el llamado de los residentes, El Estímulo, realizó un recorrido por la comunidad, en donde se constató no solo problemas de infraestructura de los edificios, sino también en los servicios públicos como son el transporte, recolección de basura, distribución de agua potable, inseguridad, entre otros.

Para llegar a El Morro, por la zona de El Llanito, calle La Línea, se debe pasar la urbanización Paulo IV. Los vecinos señalaron que el paso al sector El Encantado, se encontraba restringido por las malas condiciones de la vía, que se ha convertido en un botadero de escombros, mucho de los cuales caen al lecho del río Guaire, que ya requiere trabajados de dragado.

Lo primero que uno encuentra en el camino es  una importante falla de borde “con las últimas lluvias y las filtraciones hace un par de semanas se desprendió parte de la calle principal, han venido algunas autoridades toman fotos y se van. Nos preocupa que el terreno siga cediendo, esta es la vía principal y podría quedar inhabilitada”, denunció uno de los vecinos.

En toda la vía se observan grietas, hundimientos y también filtraciones producto de las fracturas de las tuberías de aguas blancas y servidas.Las terrazas 10, 11 y 12 son el fiel y tenebroso reflejo de lo que ocurre a los edificios construidos. Allí se observan varios edificios completamente agrietados, que diariamente se caen a pedazos. Hay lagunas de aguas mal oliente, producto del colapso del sistema de drenajes. Se observan importantes desniveles, que ya forman “escalones”, especialmente el área de los estacionamientos.

En una oportunidad las autoridades del Gobierno, intentaron reforzar las bases de estos edificios, pero de nada sirvió la inversión y el tiempo, el terreno siguió cediendo.

Estos edificios fueron desalojados, alrededor de hace dos años, pero que no fueron demolidos y ahora están invadidos. “Somos familias sin vivienda, la mayoría con niños pequeños que nos enteramos que estas infraestructuras fueron desalojadas, abandonadas y pensábamos que con nuestro trabajo podíamos repararlas, pero es imposible el terreno se hunde todos los días”, denunció uno de los ocupantes.

Aseguraron que ya fueron visitados por las autoridades del Ministerio de Vivienda y Hábitat, quienes les ofrecieron pronta solución “por eso no hemos querido denunciar públicamente nuestra situación, pues nos prometieron viviendas dignas y seguras”. De hecho, el miércoles varios de los afectados lograron entrar a las instalaciones del ministerio en Chacao reclamando soluciones.

Las paredes de los apartamentos y pasillos literalmente están explotando. Vecinos dicen que en las noches se escucha como cruje la tierra: “la semana pasada estalló una de las paredes de los apartamentos, nos asustamos mucho, eso parecía una bomba y aparecieron mucho más grietas por todas partes, aquí vivimos con miedo, dormimos con un ojo abierto y uno cerrado”, contó otra de las residentes.

A los niños no les permiten recostarse de las paredes, tampoco pueden jugar en la planta baja de los edificios por temor a la caída de escombros. Cuando llueve fuerte todo el mundo se mantiene alerta, especialmente si son horas de la noche.

Más allá de la terraza 12,  uno se topa con los restos del edificio bautizado como “El Titanic”, que no fue completamente demolido. Las torrenteras están fracturadas y la tierra se mantiene húmeda, según señala los vecinos por los cauces de los riachuelos que intentaron ser canalizados, por las distintas empresas constructoras.

En la parte alta también se observan hundimientos de la vía principal, que son esquivados por las personas que suben la empinada cuesta por la falta de transporte, muchos de ellos son niños que vienen o van rumbo a la escuela.

Siguiendo el camino, uno se topa con un espacio habilitado sin el consentimiento de los vecinos para la transferencia de basura. Los olores son insoportables, a cualquier hora del día y la noche. Allí también se han instalado un contingente de personas busca entre los desperdicios algo de comer o cualquier artículo que pueda vender.

Los vecinos de las otras terrazas de la urbanización El Morro se mantienen alertas, pues temen que los deslizamientos del terreno también afecten sus viviendas, como en las terrazas 10, 11 y 12. Esperan por la respuesta gubernamental, quieren conocer los resultados de los estudios de suelo.

Gabriel D’ Andrea, director de Protección Civil del Municipio Sucre, señaló que el movimiento de tierra se mantiene activo en el sector. “Mantenemos el constante monitoreo en toda la zona, especialmente por los antecedentes que se han presentado por los hundimientos del terreno que han afectado las edificaciones, causadas por la falla geológica y por las filtraciones que se han generado por las fracturas de los drenajes y tuberías”.

Un poco de historia

Fue en el año del 2003, cuando el fallecido presidente Hugo Rafael Chávez Frías, propuso por primera vez, que se edificara un urbanismo en el sector de El Morro. La Obra comenzó a desarrollarse en el año 2005. Se había planificado la construcción de 740 apartamentos, de 72 metros cuadrados, en un total de 8 terrazas.

Desde ese mismo momento varias fueron las personas y representantes de distintos organismos que advirtieron, que los terrenos no eran aptos, para este tipo de infraestructuras.

El arquitecto Alfredo Cilento, investigador del Instituto de Desarrollo Experimental de la Construcción de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, de la Universidad Central de Venezuela, Fau-UCV, en su momento señaló que “El Morro es un terreno desestabilizado, porque allí había una cantera, hacían voladuras para sacar la piedra y eso hace que esa tierra sea inestable”.

Igualmente los residentes de la urbanización Paulo IV, quienes son los vecinos más cercanos de la urbanización El Morro, realizaron algunas advertencias sobre el proyecto urbanístico, propuesto para dar viviendas a las familias damnificadas por las lluvias.

Son varios los informes, emitidos por las autoridades de la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas, Funvisis, y de la Dirección de Gestión de Riesgos de Protección Civil del municipio Sucre, que señalaban que en los terrenos de El Morro, nacen muchos riachuelos, con un alto nivel fréatico, con una falla geológica que viene desde Turumo y pasa por el eje de Paulo VI y El Encantado.

De hecho en los últimos años, las autoridades intentaron desalojar todas las familias ubicadas en varias partes de El Encantado, motivado a los deslizamientos de tierra y hundimiento del terreno, muchas personas quedaron en calidad de damnificadas.

En domingo 19 de diciembre del año 2010, el propio Hugo Chávez, realizó personalmente la entrega de los primeros apartamentos. El acto fue transmitido en vivo a través del programa “Aló Presidente 368”. Revisando los archivos se puede leer en la página web del Sistema Bolivariana de Comunicación e Información, Sibci, la siguiente reseña:

“Una naciente ciudad surge en El Morro, complejo urbanístico ubicado en Petare, estado Miranda, sitio desde donde el presidente Chávez transmitió este domingo su programa dominical. Este día se entregaron 120 apartamentos a familias damnificadas por las lluvias de Petare. La entrega incluye muebles, electrodomésticos y una ayuda para la alimentación».

El complejo se levanta en ocho terrazas. Está compuesto por 37 edificios de 20 apartamentos cada torre. La primera etapa involucra el desarrollo de 740 apartamentos unifamiliares de 72 metros cuadrados. Las familias que serán ubicadas en este urbanismo forman parte de la Sala de Batalla Social Argelia Laya y Simón Bolívar, del sector San Blas. Ambas conforman una comuna en construcción compuesta por 23 consejos comunales. En el recorrido inicial por la zona, el Presidente anunció que en la zona se levantarán mil 100 viviendas. El titular del Poder Popular para la Vivienda anunció que la primera etapa estará completamente entregada en 2011”.

Pero solo habían pasado dos años de ese momento, cuando se emperezaron a evidenciar graves problemas en los edificios de las terrazas 10, 11 y 12, motivado a los hundimientos del terreno. Tanto así que fue necesario demoler el edificio 5 de la terraza 10, conocido como “El Titanic”, ya que el edificio comenzó a hundirse, recordando a los vecinos el famoso barco que se naufragó en el océano.

Las autoridades de la alcaldía del municipio Sucre, informaron que para la Fundación Misión Hábitat, encabezada en ese entonces por Migdalia León, no solicitó los permisos de habitabilidad, tampoco presentaron los respectivos estudios de suelo para levantar el urbanismo.